Memorias de una infancia en 23 cartas

Memorias de una infancia en 23 cartas

Un conmovedor relato desde los ojos de una huérfana

Por:
mayo 29, 2015
Memorias de una infancia en 23 cartas
Foto: tomada de elmalpensante.com

"Memoria por Correspondencia" es la recopilación de 23 cartas en las que Emma Reyes relata sus recuerdos de infancia a su amigo Germán Arciniegas. La devastadora orfandad de Emma y su hermana Helena es narrada desde una mirada inocente, limitándose a describir recuerdos desnudos de una vida en medio del hambre, la pobreza y la ausencia de afecto. No obstante, y a pesar de las numerosas adversidades, el idilio de la temprana edad siempre está presente para llenar las cartas de dichas transitorias y de alegrías de un tiempo fallecido.

Lo fascinante de la correspondencia de Emma es su capacidad para preservar los ojos de la niñez, los cuales le permiten rescatar lo más valioso y esencial de ese naufragio histórico. Anécdotas que enajenan, que producen un dolor con sabor a infancia, de impotencia y abandono, que atormentan al lector como un largo poema Vallejiano. Su claridad y el orden cronológico de sus recuerdos que nos cuestionan si la memoria es una imagen de la realidad, o por el contrario, si se trata de una ficción que creamos para superar a nuestro pasado.

Las primeras cartas hablan de sus primeras memorias junto a su hermana y a la señora María. Aunque en el texto no se revela si hay parentesco entre la señora María y las hermanas Reyes, es evidente que el vínculo sentimental es delgado y  mezquino, y que es aún más precario en lo que se refiere a la pequeña Emma. Después de mucho culpar a las pequeñas de 5 y 7 años por las desgracias de su vida, la señora María finalmente las abandona en una estación de tren, sin adioses, sin instrucciones, dejándolas rotas y más huérfanas que nunca.

En medio de la desolación y el desamparo, recuerdan ingresar a un convento en el campo en él que, entre sotanas, rezos y paredes grises, habitarían hasta el final de su adolescencia. Quizá es ahí, en un mundo regido por las normas espirituales y moral de marcado tinte católico, en donde se hace más evidente que la infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir. En el convento, culto de hipocondría para salvarse del infierno, controlaban cualquier rebelión propia de la juventud con argumentos místicos y esclavizaban a estas jóvenes almas pecadoras con una diversidad de oficios a cambio de su redención. La barbarie, el maltrato y la humillación que vivió dentro del mismo, dejó en Emma la coraza plagada de cicatrices y una dureza de carácter que terminó formando esta extraordinaria artista, aunque aún prime su anonimato entre los colombianos.

Este es un relato que prueba una vez más que todo se engrandece al pasarle recuerdos. Que la magia de la infancia consiste en que a pesar no entender instrucciones y normas de comportamiento, tenemos en nuestras narices la verdadera belleza que se oculta en pequeños momentos, e integra memorias latentes que siempre estarán ahí para que no nos arrebate el olvido. La arbitraria selección de los recuerdos que elegimos conservar es la prueba fidedigna de que la memoria puede ser hasta más peligrosa que la mismísima imaginación. Y es que como dice García Márquez, “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda, y cómo la recuerda para contarla”.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Reconocido youtuber colombiano habló de su experiencia en Ucrania; no es como se ve en las noticias

Reconocido youtuber colombiano habló de su experiencia en Ucrania; no es como se ve en las noticias

Un multicampeón es el último deseo de Marcela Gómez en América; ya hay oferta formal

Un multicampeón es el último deseo de Marcela Gómez en América; ya hay oferta formal

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--