El alza de la canasta familiar, de la gasolina, de la tributación de las rentas de trabajo nos pone ante el gran raponazo para las clases medias, los vulnerables y pobres
La felicidad individual y la paz colectiva no se encuentran en los cambios sino en la depuración de lo que existe para reforzar lo positivo y eliminar lo negativo
La empobrecida clase media soporta una precariedad que no le preocupa a nadie y menos al gobierno, que le prepara aumento del IVA y ampliación de base para declarar renta
"Abundan las maniobras politiqueras para favorecer a quienes pretenden mantener un régimen económico perverso e inviable cuyo nombre no puede salir a la palestra"
"Según el Dane, las personas que ganen $450 mil pesos al mes son considerado clase media, ¿cómo se enfrenta una cuarentena -seguramente- indefinida con estos ingresos?"