El largo camino de la mujer hacía la participación política

El largo camino de la mujer hacía la participación política

"A pesar de las múltiples candidaturas presidenciales femeninas en la historia de Colombia, una mujer nunca ha ganado la presidencia"

Por: Diego Alejandro Casas Ramírez
marzo 08, 2017
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El largo camino de la mujer hacía la participación política

A pesar de las múltiples candidaturas presidenciales femeninas en la historia de Colombia, las cuales tuvieron que esperar 164 años para consolidarse, una mujer nunca ha ganado la presidencia. El camino fue duro para ver una participante mujer en las elecciones, pues lo consiguieron con una serie de logros históricos, y no fue necesario, como en otros países del mundo, ser esposas de presidentes para luego aspirar al  cargo; además, esta lucha femenina siempre estuvo aplazada por diversos factores. A continuación se presenta una breve investigación de los momentos históricos que permitieron la llegada de la mujer a la política y de cómo aspiraron a una presidencia por primera vez.

Todo comienza en 1852 cuando los liberales empiezan a postular candidatos a la presidencia para buscar un remplazo de José Hilario López. Un liberal de Bogotá vota a favor de  Sixtina Pontón de Santander, viuda del expresidente y padre de la patria Francisco de Paula Santander, para la presidencia: algo inédito en el mundo. Sin embargo, este primer intento pronto se vió frustrado ya que, en esa época, eran muy pocos los que apoyaban a las mujeres en la política, no sólo en Colombia, sino también en todo el mundo. Al final, ganó la presidencia el candidato de los liberales draconianos: José María Obando. Un año después vino otro gran golpe político para las mujeres colombianas.

Ya en 1853 estaba vigente una nueva constitución en Colombia de corte liberal en la que las provincias presentaban mucha autonomía respecto al gobierno central. Inspirados por la revolución francesa de 1848, los liberales fueron adoptando progresivamente el sufragio universal para los hombres y el voto directo. En la provincia de Vélez en cambio, el sufragio se extendió también para las mujeres con el artículo séptimo de la Carta en el que se establecía que son electores todos los que habiten la provincia siempre y cuando sean casados o mayores de 21 años, y en el artículo tercero donde se señalaba que al momento del voto no debería haber distinción de género, un acto inédito. Para desgracia de las mujeres, se anularon los artículos de la Carta de Vélez, principalmente, porque violaban la Constitución de Colombia al contradecir el mandato de la Constitución nacional que exigía la calidad de ciudadano, la cual sólo cobijaba a los varones, y porque la Corte Suprema de Justicia señaló  “que los habitantes de la provincia de Vélez no podían tener más derechos y obligaciones que los demás granadinos".

En el siglo XIX la mujer no alcanzó ningún logro significativo para conseguir una candidatura presidencial, pero en el siglo XX en los años de “la República Liberal”, específicamente en el gobierno de Alfonso López Pumarejo, las mujeres van a poder entrar por primera vez a la universidad, lo que marcó un logro importante para la actividad política de las mujeres porque desde ese momento el género femenino estaría igualmente preparado a hombres para ejercer cargos públicos.

Después,  la década de 1950 fue histórica para las mujeres colombianas debido a que el delegado de Antioquia Félix Ángel Vallejo presentó a la Asamblea Nacional Constituyente en 1954 la iniciativa del voto femenino inspirada por el general Rojas Pinilla, en la que se le otorgaba la totalidad de los derechos políticos a las mujeres. Tanto militantes del partido conservador y liberal le hicieron oposición a esta propuesta, pero el 25 de agosto de 1954 el proyecto fue aprobado por la plenaria de la Asamblea por el Acto Legislativo No. 3 de 1954 que consagraba en el primer artículo: “Son ciudadanos los colombianos mayores de veintiún años ” y en el tercero: “queda modificado el artículo 171 de la Constitución en cuanto restringe el sufragio a los varones.” Esta propuesta tuvo 60 votos a favor y ninguno en contra, pues los opositores abandonaron el lugar a la hora de votar. Esta Asamblea Nacional tuvo su cuota femenina pues  la liberal Esmeralda Arboleda y la conservadora Josefina Valencia fueron constituyentes, y  más adelante fueron las primeras mujeres en ocupar cargos políticos.

No obstante, las mujeres al no poseer cédula de ciudadanía no podían ser funcionarias del gobierno, por lo que se les impidió ejercer el derecho a ocupar cargos públicos; también por falta de este documento, que sólo los hombres mayores de 21 años podían tener, estaban imposibilitadas para votar. Así, las mujeres no iban a dejar aplazar nuevamente sus derechos políticos y emprenden una dura contienda para la cedulación, en la que también participaron Esmeralda Arboleda y Josefina Valencia en la que  el 4 de marzo de 1955 logran que el establecimiento del decreto 502  donde se extendió a todos los colombianos la cédula de ciudadanía y en su  artículo primero consagró que: “extiéndase a todos los colombianos mayores de 21 años la cedulación adoptada por el decreto número 051 del 13 de enero de 1954”.

El 25 de mayo de 1956 en Colombia se expide la primera cédula de ciudadanía para una mujer, esta mujer era Carola Correa la esposa del Rojas Pinilla con el número 20.000.001 y la segunda fue su hija María Eugenia Rojas con el número 20.000.002.

Al terminar el gobierno de Rojas Pinilla, en el que la mujer había alcanzado grandes impulsos hacia una carrera presidencial, Josefina Valencia fue nombrada gobernadora del Cauca, convirtiéndose en la primer mujer gobernadora en la historia del Colombia. Posteriormente, el poder estuvo en manos de una Junta Militar que derogó todas las leyes expedidas por el régimen dictatorial de Rojas Pinilla, entre ellas el sufragio femenino. Frente a ello el partido liberal y el conservador, encabezados por Alberto Lleras Camargo y Laureano Gómez respectivamente,  solicitaron una reforma constitucional a la Junta, la cual se sometió al voto popular con un referendo el primero de Diciembre  de 1957. Uno de los puntos de la reforma concebía que  las mujeres tendrían los mismos derechos políticos que los hombres; de manera que  las mujeres votaron con un total de 1.853.255 votos, lo cual represento el 42% de los votantes en el país, por primera vez en la historia de Colombia.

Ahora bien; en el Frente Nacional las primeras mujeres fueron  irrumpiendo la política como Esmeralda Arboleda, que fue la primera senadora, y las representantes María Nieto de Caro, Ana Carcis Cardona, Josefina Valencia, Ofelia Uribe, Dolly Suarez, Carmen Ochoa. También ocuparon puestos como secretarías de partidos, ministerios, concejos, curules en el Senado y embajadas; pero no se hablaba aún de una candidatura presidencial femenina, la cual tuvo que esperar hasta las elecciones de 1974.

Con una ANAPO debilitada en las elecciones parlamentarias de 1972, y con el general Rojas Pinilla enfermo, los anapistas comenzaron a pensar en el futuro del partido de cara a las elecciones de 1974  pues tenían la dura tarea de cargar con los votos de las elecciones pasadas que casi le dan el triunfo a Rojas Pinilla; por eso, le dan la dirigencia a María Eugenia Rojas, también llamada “la capitana”, y la segunda cabeza más visible de la ANAPO, quien ya había sido, entre otras cosas, senadora, diplomática  y concejala, la postulación anapista para ser la candidata a las elecciones presidenciales. Esta carrera electoral iba a ser contra Álvaro Gómez y López Michelsen, dos delfines de la política. Ella perdió estos comicios, y aunque 492.166 colombianos depositaron su voto en ella dejándola en tercer puesto, logró consolidar lo que desde 1852 se había esfumado y aplazado: ver a una mujer como candidata a ocupar la Presidencia de la República

Referencias:

http://www.banrepcultural.org/revista-70

http://www.registraduria.gov.co/rev_electro/2012/rev_elec_dic/revista_diciembre2012.html

http://www.bdigital.unal.edu.co/47963/6/40a%C3%B1os.pdf

http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/historia/docpais/voto-femenino.htm

Bushnell, D. (2015) Colombia una nación a pesar de sí misma. Bogotá: Planeta

* Estudiante Facultad de Ciencias Políticas de la UPB

*CEPRI

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