En 2014, Raúl Giraldo decidió convertirse en el dueño del Medellín, en un momento en que el club estaba al borde de la quiebra. Por ese entonces, el poderoso tenía deudas por más de 6 mil millones y uno de sus patrocinadores, Surtimax, quería decir adiós. El granadino llegó como el gran salvador y a punta de inyecciones económicas ha logrado clasificar al rojo de la montaña a 10 finales en menos de 10 años. La última de ellas es la de la Liga BetPlay 2023-II, que se disputará a finales de año y en la que el DIM podría conseguir su séptimo título. Aun así, la historia de Raúl Giraldo inició muy lejos de las canchas.
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La historia de Raúl Giraldo, el tendero que conquistó Cali
Raúl Giraldo vivió los primeros años de su vida en la vereda Calderas, a 2 km de Granada, Antioquia. Cuando pequeño, lejos de pasar tiempo pateando balones en la cancha de la escuela, prefirió dedicarse a aprender matemáticas porque lo ayudaba a hacer cuentas. Siempre mostró una fuerte inclinación hacía los negocios y a la edad de 9 años, vendiendo plátanos, se dio cuenta que era bueno en eso. Así fue como se metió en la cabeza que iba a ser un gran empresario y como en su pueblo las oportunidades eran reducidas, decidió irse a Cali.
Allá llegó a la casa de una tía, conocida como Rosario, a probar suerte. En primer momento querían meterlo a estudiar, pero él, terco, dejó claro que lo que quería era vender y poco a poco se fue haciendo un espacio en el mercado La Floresta, donde puso un toldo. Allí dio inició a lo que se convertiría en un emporio de supermercados de la mano del también empresario, Tulio Gómez, quien es su cuñado, dueño del América y quien fue su mano derecha cuando apenas dio sus primeros pasos como tendero.
Su primera tienda la montaron en el barrio Siloé, después de comprar un local que estaba al borde de la ruina. El inicio no fue fácil, trabajaban más de lo que descansaban y las ganancias no eran las mejores; pero después de dos años, el negocio empezó a despegar y lograron poner más puntos en la capital del Valle del Cauca. Su fama se acrecentó y con el tiempo la marca Superinter, que ambos habían fundado, llegó hasta el eje cafetero y luego fue vendida al Grupo Éxito, en un negocio que significó miles de millones de pesos para ambos empresarios.
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Su entrada el fútbol como dueño del Medellín
La venta de Superinter por parte de Tulio Gómez y Raúl Giraldo coincidió con la compra del Deportivo Independiente Medellín por parte del empresario granadino. Fue en 2014 cuando se convirtió en máximo accionista del equipo, en un negocio que él sabía que le iba a dejar más pérdidas que ganancias en un inicio. Aun así, decidió invertir y su mano rápidamente empezó a notarse, no sólo en lo económico sino en lo deportivo. Lo que ha hecho el antioqueño con el poderoso de la montaña es de aplaudir, poniéndolo en los reflectores del fútbol colombiano.
Para iniciar, Giraldo logró estabilizar la economía del club y mantener patrocinios relevantes como el de Colanta o el de Pilsen, además de obtener apoyo de otras marcas como Pepsi, entre 2016 y 2018, y WPlay.co en la actualidad. Además, creó una estrategia para que la hinchada volviese a apoyar al rojo, regalando boletas a quienes las compraran iniciando el semestre, lo que hizo que más fanáticos fueran al estadio. Gracias a su inyección, el tema de los fichajes también dio un vuelco de 180 grados y las estrellas empezaron a desfilar por el club.
Ha sido tan arduo el trabajo del granadino, que incluso en el momento más complicado de su dirigencia en el DIM, cuando trató de venderlo en 2020, el equipo le respondió y resultó campeón de la Copa Colombia, situación que lo hizo olvidar de la idea de dejar ir al club de sus amores. Ahora, es uno de los equipos que más ganancias genera en el FPC, llegando a los $45,8 mil millones para 2022.
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Las finales del DIM de la mano de Raúl Giraldo
El Deportivo Independiente Medellín ha logrado 9 finales en los últimos 9 años y está próximo a jugar su décima. Ha alzado tres títulos, uno de liga y dos de copa, y ha tenido una presencia importante en las fases finales del fútbol colombiano. La mano de Raúl Giraldo puso al DIM de nuevo entre los equipos competitivos del FPC y queda claro con la campaña que está realizando en el actual semestre, donde no solo quedó segundo del Todos contra todos, sino que clasificó a la final dejando en el camino a Millonarios, América y Nacional en los cuadrangulares. Este ha sido su camino:
- 2014: subcampeón del clausura perdiendo contra Santa Fe.
- 2015: subcampeón del apertura perdiendo contra Deportivo Cali.
- 2016: campeón del apertura derrotando a Junior.
- 2017: subcampeón de la Superliga perdiendo contra Santa Fe.
- 2017: subcampeón de la Copa Colombia perdiendo contra Junior.
- 2018: subcampeón del clausura perdiendo contra Junior.
- 2019: campeón de la Copa Colombia derrotando a Deportivo Cali.
- 2020: campeón de la Copa Colombia derrotando a Deportes Tolima.
- 2022: subcampeón del clausura perdiendo contra Pereira.
- 2023: finalista del clausura.
