¿Qué es la democracia?

¿Qué es la democracia?

El pueblo es el poder y toma las decisiones de una forma organizada mediante mecanismos de participación directa, que incide en la transformación social

Por: John Jairo León Muñoz
septiembre 14, 2023
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¿Qué es la democracia?

¿Qué es la democracia? Cuando el pueblo es el poder y toma las decisiones de una forma organizada mediante mecanismos de participación directa, que incide en la transformación social y, eso implica cuidar colectivamente de sí misma y para sí misma. Cuidar del territorio, lo que da el territorio y a quiénes les da, y qué les da, y cómo se distribuye lo que da, que puede ser una riqueza. La democracia también puede ser una pobreza si los mecanismos de participación directa en la sociedad se tergiversan, se desarticulan. Cuando el pueblo no es el poder y se corrompen las ideas. En la democracia puede ser que suban al poder las ideas pobres, las que piensan que el progreso se mide en cosas y escasez de tiempo.

Según Plutarco había que gobernar para los artesanos y los campesinos. Hoy en día democracia también es gobernar para los artesanos, los campesinos, los nobles, los despojados, los sin tierra. Es garantizar derechos fundamentales a los que apenas nacen y, también a los que nacieron y ya habitan un espacio. Y que se brinden posibilidades de trabajar y de educarse con dignidad. Y que se ofrezca la forma de habitar en pluralidad.

Una forma de hacer uso de la democracia o gobierno para el pueblo y para el pueblo es a través de la política y de las elecciones populares. Un territorio que desde el concepto de democracia, es de todos y para todos, por lo tanto conviene elegir candidatos y candidatas que gobiernen y promulguen y logren con ahínco, preservar la salud, cuidar la educación, proteger el medio ambiente, garantizar la cultura, y proveer garantías laborales. Además priorice a los niños y niñas, los jóvenes y los adultos mayores (la memoria y el presente de un pueblo).

Una forma de ir en contra de la democracia es la oligarquía (que en griego significa un gobierno para pocos.) ¿Colombia ha estado gobernada por la oligarquía? ¿Quiénes son los oligarcas? los políticos. En una oligarquía los políticos gobernantes se hacen cada vez más ricos y se olvidan de ofrecer virtud. Y, la virtud es la disposición de hacer el bien a otros. Colombia se ufana de ser demócrata, pero se encuentran gobernantes oligarcas con un deseo de ser aristócratas. Y, la aristocracia es una forma de riqueza para pocos, muy pocos, limitados, que se creen superiores a los otros. Oligarquía entonces es tiranía. El tirano domina las masas, si se adueña de ellas, domina la democracia diría Platón. Si hay tiranía se pierde la libertad. Entonces predominan los pequeños oligarcas que se adueñan de las calles, del presupuesto público, de los deseos de progreso del pueblo. Los tiranos oligarcas compran millonarias casas, viajan con el dinero de los impuestos con sus familias por Asía, Europa, Estados Unidos. Desprecian Colombia como destino turístico y les huele feo Latinoamérica. Despilfarran los recursos del municipio en fiestas, en la estética machista que invierte en cirugías para sus esposas, en la construcción de fincas, en pavimentar lo que no se necesita pavimentar. Se vuelven expertos, desde su tiranía, en robarse todo, hasta el sueño y la utopía.

¿Y qué es la libertad? Libertad puede ser democracia. Y, en esa libertad aparecen líderes que halagan, que quieren complacer el deseo, que seducen con la palabra o que cortejan con las cosas: juguetes, plata, tejas, cemento, sueños.  Libertad dice Jorge Furtado “es una palabra que el sueño humano alimenta. Y no hay nadie que la explique y nadie que no la entienda.” Si la libertad es un sueño que el humano alimenta, se convierte en un suelo fértil para que tenga vida el tirano que puede manipular al pueblo y, a su vez dominar la democracia. Cuando el demagogo te hace perder la fe en los buenos y, siendo malo se presenta como bueno, la fe en el hombre se atrofia, convulsiona y es fácil que la gente ceda a un demagogo, un sofista que se cree salvador y protector de lo que con el tiempo se robará.

¿A quién elegir? Dice Platón en la República: “¿Entonces, si nuestros gobernantes deben ser los mejores guardianes, ¿no han de ser acaso los más aptos para guardar el Estado? ¿Y en tal caso ¿no conviene que, para comenzar, sean inteligentes, eficientes y preocupados por el Estado?” en ese sentido ¿Han gobernado brutos en Colombia? ¿Han gobernado hombres sin ideas? ¿Han gobernado alianzas que les interesa solo ellos y ellas y sus mezquinas formas de gobernar? La libertad ha hecho que en Colombia se elija con manipulación hacía los votantes: se venda como salvador de la salud el que en gobiernos pasados la acabó. Se venda el anticorrupción el que en gobiernos pasados se robó el arte y la poca cultura. Se promueve el miedo, las calles hoy son un escenario de robos y sicariato. Se ofrece una mejor Colombia y no se cumple. Se destruyen los recursos propios, por lo tanto se acaban las esperanzas y, a su vez las instituciones, se instala el miedo, la desazón suprema. En un hospital deteriorado da miedo enfermarse. En un tránsito politizado y con indicios de corrupción da miedo transitar las calles. En un río convertido en un basurero da miedo beber de sus aguas. Una plaza de mercado que no garantiza el espacio a los campesinos ni les da dignidad a los vendedores, da miedo comprar. Una Colombia que crece sin control y apresuradamente, da miedo la seguridad.

Habría que escoger a líderes hombres y mujeres que tengan sensibilidad artística, que sean incorruptibles, qué se pregunten por la historia de Colombia, que les preocupe la arquitectura, la naturaleza, la literatura, la música, la economía, que conozcan de cultura, que respeten y gobiernen también hacía las ideas liberales, que les preocupe el otro, la otra. Que deseen la paz, que quieran que una sociedad se repare con verdad y justicia. Habría que escoger líderes que se cuestionen: ¿Cómo resolver un problema con una acción justa? ¿Cómo detectar problemas a tiempo y, a su vez encontrar las soluciones? ¿Cómo cuidar los recursos públicos? ¿Cómo hacer del deporte y la cultura un estilo de vida en niños y jóvenes? ¿Cómo agrandar la posibilidad de acceder al conocimiento? ¿Cómo evitar la deserción escolar? ¿Cómo regresar el cine? ¿Cómo construir la educación sexual del municipio? ¿Cómo abrir microempresas? ¿Cómo destruir el origen del mal o cambiarlo? ¿Cómo fomentar para que los jóvenes se tomen el poder? ¿Cómo garantizar vivienda? ¿Cómo darles poder a las mujeres, a las mujeres trans, a los indígenas, a los negros? ¿Cómo cuidar la vida? También líderes que no sean ajenos al cambio climático. Que gobiernen con la pluralidad étnica, sexual, de género. Líderes que vivan de su sueldo y no de la plata de los colombianos. Líderes que piensen que en la democracia el ser humano es el centro, por lo tanto lo es todo.

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