Nombramientos caídos, renuncias y cambios de funcionarios, todo sumado con el escándalo de los pasaportes que tuvo al país en vilo durante un año, han sido el pan de cada día de la Cancillería durante el gobierno de Gustavo Petro. Hasta ahora, tres personas han ocupado el cargo de Canciller y seis más se han repartido los dos viceministerios. Hoy a lista a la que habrá que agregarle un nombre más ante la renuncia de Daniel Ávila, quien desde el 31 de enero se desempeñaba como viceministro de Relaciones Exteriores.
Daniel Ávila fue nombrado en el cargo apenas dos días después de la llegada de Laura Sarabia, quien terminó armando un equipo con él y con el académico Mauricio Jaramillo Jassir, el viceministro de Asuntos Multilaterales. De esta manera, la Canciller balanceaba las cargas y se aseguraba de tener a un hombre cercano a la causa del Petrismo y además a la causa palestina como Jaramillo por un lado y a un experimentado diplomático con bastante peso dentro de la entidad como lo es Ávila por el otro. Algo que además le permitía contar con la bendición de los sindicatos de la entidad.
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Sin embargo, esto no duró mucho. Ávila, quien venía de ser encargado de Negocios en la Embajada en Washington -donde llegó a trabajar de la mano con Luis Gilberto Murillo y donde llegó a ser Embajador encargado- todavía tenía asuntos por resolver en Estados Unidos, por lo que había pedido permisos para viajar, los cuales son conocidos como comisiones. Pero, después de tres meses la Presidencia y en particular el Dapre se le habría comenzado a atravesar negándole los permisos.
Al final, alegando motivos personales, el diplomático decidió que lo mejor era apartarse
Esto representa un duro golpe para la Cancillería y más si se tiene en cuenta que se trata de uno de los funcionarios con una trayectoria más amplia dentro de la entidad y quien además ya era conocido dentro de los círculos de poder de Estados Unidos, país con el que se han mantenido tensas las relaciones desde la llegada de Donald Trump al poder.
En su lugar llegará la economista Yolanda Villavicencio, cuya hoja de vida ya fue publicada en el portal de la Presidencia. A diferencia de su predecesor, su vinculo con la Cancillería es mucho más reciente, ya que trabaja allí desde noviembre de 2022, fecha en la que estaba a la cabeza Álvaro Leyva.
A ella se le delegó la dirección de 'Colombia Nos Une', un programa que busca fortalecer los vínculos entre los colombianos en el exterior. Algo que no ha pasado desapercibido, puesto que esa labor la tiene con una investigación en la Procuraduría por presuntamente haber contratado con la ONG América España Solidaridad y Cooperación (Ainco), de la cual ha sido presidenta.
Esta ONG se dedica a obtener recursos para ejecutar proyectos de desarrollo local que beneficien a la población migrante de Latinoamérica en España, país en el que ella ha vivido durante las últimas dos décadas y en el que incluso llegó a ser diputada en la Asamblea Regional de Madrid entre 2007-2011.
Ahora será la cabeza de un Viceministerio por el que han pasado, además de Ávila, el también experimentado diplomático Francisco Coy y Jorge Rojas, un aliado de vieja data del Petrismo que terminó saliendo para tener un fugaz paso por el Dapre.