Fueron siete meses, el tiempo que el presidente Gustavo Petro se vio obligado a llevar una gorra deportiva, algunas veces de color negra, otras de color azul turquí, pero siempre con el símbolo del escudo nacional. Entre febrero y agosto de 2024, no importaba el evento al que asistiera, si vestía saco y corbata para reuniones formales o usaba un look casual de tenis y jeans para visitar territorios, el Presidente nunca se quitaba la gorra que se convirtió en su accesorio infaltable a causa de su trasplante de pelo del presidente Petro.

Pero en mayo de 2024, el presidente Petro se arriesgó y durante la ceremonia de posesión de Luis Gilberto Murillo como Canciller en la Casa de Nariño, se quitó la gorra, dejó al descubierto una cabeza rapada en la parte frontal con algunos folículos abiertos con los que aparentaba un aspecto bastante diferente al que solía llevar. Esta imagen levantó todo tipo de comentarios y cuestionamientos en la opinión pública sobre el aspecto del presidente Petro quien se volvió a poner la gorra desde ese momento hasta octubre del año pasado.

En la COP16 en Cali para inaugurar la conferencia de la biodiversidad, Petro se quitó la gorra que no lo abandonó durante siete largos meses. Se le vio con un cabello más abundante que el que había tenido en los últimos años.
El presidente Petro se sometió a un injerto capilar, una cirugía en la que se trasplantan folículos pilosos de la parte posterior o lateral de la cabeza, donde el cabello es más denso y resistente a la caída, y del pecho también, a las áreas donde hay pérdida de cabello o áreas de calvicie.
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En este tratamiento contra la alopecia se extrajeron unidades foliculares del presidente Petro para trasplantarlas a las zonas más afectadas que tenía a causa de la caída del cabello. La ventaja de este tipo de injerto es que es mínimamente invasivo y permite una recuperación más rápida en comparación con otros métodos. Los resultados suelen ser naturales, ya que el cabello trasplantado sigue creciendo como lo hacía en su lugar original.
En los últimos años este el trasplante de pelo ha ganado popularidad pues se lo han realizado políticos y celebridades como es el caso del cantante Pipe Bueno, el chef Chris Carpentier y los actores Jacques Toukhmanian, Lucas Buelvas, Pedro Palacio, Diana Hoyos, Sebastián Carvajal y Angélica Blandón.
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El presidente Petro habría iniciado el tratamiento en 2024. En los primeros días después de que una persona se somete a un injerto capilar, el cuero cabelludo se hincha y presenta enrojecimiento en las áreas tratadas.
Luego, como le sucedió al Presidente, las zonas son cubiertas por costras que se pueden caer a los diez días y luego de dos semanas, se caen por completo. Aunque se debe tener cuidado para evitar infecciones, el presidente Petro prefirió usar la gorra con el escudo nacional y no se la quitó hasta el séptimo mes cuando los resultados empezaron a ser mucho más visibles y el cabello trasplantado ya le estaba creciendo de manera natural. Ahora, un año después se ve su sorprendente transformación.