El Bulevar del Río, el pulmón espiritual de Cali

El Bulevar del Río, el pulmón espiritual de Cali

Es un espacio de liberación de tensiones, de encuentros inesperados, de aprendizaje con otros, de disfrute ambiental, de conversación, de conocimiento humano, de diversidad

Por: Carlos Fernando Rodríguez B
septiembre 20, 2018
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
El Bulevar del Río, el pulmón espiritual de Cali

El viernes por la tarde, desde las cuatro, cuando el viento en la ciudad se vuelve intenso, reduciendo el calor natural, en el Bulevar del Río se congregan grandes cantidades de personas, se podría decir que cientos, a conversar, a beber cerveza, a montar en tabla, a ver actividades artísticas. Se forman muchos grupos reunidos para disfrutar. Ese es el valor de uso de la ciudad, el disfrute, el ocio, el gozo estético.

Ahora bien, una de las hipótesis sobre la violencia urbana y los problemas psicológicos de sus habitantes se relaciona con la falta de espacios para valor de uso, cuando la ciudad solo se piensa en el valor de cambio (lo productivo) y las nuevas urbanizaciones o conjuntos residenciales buscan maximizar los beneficios económicos, reduciendo espacios de disfrute a sus habitantes.

Sin embargo, también vemos casos de algunos parques de barrio que son amplios, arborizados y adecuados para el disfrute, pero que son tomados por grandes agrupaciones de jóvenes que los convierten en sitios de consumo de estupefacientes y espacios “peligrosos” para ser visitados por las familias.

Es decir, hay espacios para el uso de la ciudad, pero estos de igual manera representan un factor de mayor violencia y falta de convivencia. Ahí queda la inquietud.

En el 2012 en la ciudad de Cali se adecuó un espacio en el centro de la ciudad destinado totalmente para el disfrute y hoy, seis años después, se considera que ha cumplido su objetivo inicial y ha abierto un nuevo entorno para apropiarse y disfrutar de la ciudad. Este es el Bulevar del Río.

El bulevar es un espacio que ha resultado exitoso para el uso de los ciudadanos. Fue un acierto creado, pues el trazo original de la ciudad no lo incluía. Además, es un trayecto que se le “robó” a las congestionadas vías que antes pasaban por este mismo sitio y fue producto de un proceso de transformación urbana que buscaba brindarle a los ciudadanos más espacios de disfrute: se hundió una vía de alto flujo de tráfico, se cubrió, se creó un túnel de más de un kilómetro de largo y por encima se diseñó un paseo peatonal entre el río y los antiguos y emblemáticos edificios, rematando en la iglesia símbolo de la ciudad, La Ermita.

Espacios como el bulevard, a pesar de ser creados para un “ocio controlado”, brindan la oportunidad de que las personas disfruten de la ciudad sin necesidad de comprometerse económicamente, no viéndose obligados a consumir o a exponerse a la publicidad y a las tentaciones compradoras mientras se recrean, que es lo que sucede en los centros comerciales.

Además, permite recibir una de las fortalezas de la ciudad: la brisa vespertina y verse expuesto a su exquisitez en medio de esa luz tenue del atardecer, rodeado de cientos de personas conectadas con esa sensación placentera. Cualquier día y cualquier época del año son apropiados para estar en el bulevar (un día laboral, un día festivo, un sábado, en vacaciones de medio año, en diciembre, en Semana Santa). Es un espacio de inclusión, tolerancia, convivencia y seguridad, donde hay una leve vigilancia que aunque no cumple un papel represivo o coercitivo sí asegura una estadía tranquila en el sitio.

Allí podemos encontrar familias tradicionales, empleados de oficinas, obreros, hipsters, población lgtbi, ciclistas, artistas, estudiantes de colegios, habitantes de calle, turistas, atletas, desempleados. Es un sitio que aún no ha sido tomado por un sector específico de la sociedad convirtiéndolo en una especie de gueto. Aquí todavía cabe la gran diversidad de la ciudad.

Hoy cientos de personas se lo toman, forman grupos relacionados por cierto interés y explayan todas sus presiones durante dos o tres horas para retornar a sus dinámicas laborales y sociales propias.

El bulevar es un pulmón espiritual de la ciudad, espacio de liberación de tensiones, de encuentros inesperados, de aprendizaje con otros, de disfrute ambiental, de conversación, de conocimiento humano, de diversidad.

Aquello que la ciudad nueva comenzó a destruir al formar los barrios dormitorio en los suburbios y la división de la vida de la gente en funciones separadas, espacios como el bulevar tratan de rescatar para hacer la ciudad un espacio y un tiempo de disfrute, no solo de productividad económica.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
Las EPS, ¿homicidas por omisión?

Las EPS, ¿homicidas por omisión?

Nota Ciudadana
Escribo poemas para trascender el tiempo

Escribo poemas para trascender el tiempo

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--