Carnaval de negros y blancos: ¡Qué viva Pasto, carajo!

Carnaval de negros y blancos: ¡Qué viva Pasto, carajo!

Es tradición del carnaval tirarse harina y espuma, además de aplicar pintura negra en el rostro, hecho que se convierte en un verdadero disfrute para los visitantes

Por: Laura Cecilia Bedoya Ángel
enero 22, 2024
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Carnaval de negros y blancos: ¡Qué viva Pasto, carajo!
Fotografía: Canva

Este artículo es el resultado de mi viaje a Pasto para presenciar el Carnaval de negros y bancos, evento que fue proclamado por la UNESCO en 2009 como Patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.

Sólo estando allí se entiende ese tejido de la manifestación cultural, a través de la visita a los talleres de los maestros que trabajan en las esculturas para el desfile de carrozas, unas con motivos míticos, otras históricos, de humor político y demás, fabricadas en tamaños colosales, donde los espectadores de distintos lados son recibidos con la proverbial hospitalidad de los pastusos.

 También está el desfile de las comparsas de baile, acompañadas de conjuntos musicales. La uniformidad de cada grupo, el cuidado del atuendo que va desde los penachos hasta los zapatos, el maquillaje y el colorido son de una belleza y una expresión de arte que dan cuenta del sentido de pertenencia , del cuidado de los personajes y de todo lo que significa el carnaval. En lo que respecta a los grupos musicales es de admirar la cantidad de jóvenes interpretando la quena y la zampoña, haciendo honor a la tradición de la música del altiplano andino.

Hay otras actividades dentro del carnaval que ellos llaman juego y es tirarse harina y espuma, además de aplicar pintura negra en el rostro, hecho que se convierte en un verdadero disfrute para los pastusos y los visitantes de otros lugares. Es aquí donde quisiera hacer un alto para presentar el invitado central del carnaval, el dios Dioniso descrito por Carlos García Gual como “El dios griego de la máscara y del frenesí, de la danza enloquecida, del entusiasmo y la embriaguez, ... y, para delicia de los humanos, es el introductor del vino que disipa las penas, el patrón de la fiesta teatral, un dios extraño y fascinante”.1

Pero también, si voy a hablar de lo dionisíaco debo abordar lo apolíneo, que fue tratado por Nietzsche en El nacimiento de la tragedia, aquí plantea la noción de lo apolíneo y lo dionisíaco “para hacer una formulación sobre el arte que es efectivamente esencial”.2 Para el filósofo el arte es algo fundamental en la vida.

| También le puede interesar: ¿No que le daba mucha pena? la mujer que mostró los senos en Pasto resultó con OnlyFans

Lo apolíneo según Nietzsche es todo lo que da forma, por lo tanto, tiene límites y procura una regulación. “Lo apolíneo es también el límite del yo, la producción y el intento de mantener en continuidad la unidad de una identidad, de un yo. Lo dionisíaco es lo contrario, es decir, es la búsqueda de lo que está más allá del yo; es embriagarse, extenderse, comunicarse, ir hacia lo pre -personal colectivo. La fiesta de Dionisios, en la que todos olvidan el yo y, en general, la noción misma de fiesta que rompe los límites y las costumbres, se sale del tiempo sucesivo y entra en la suspensión festiva. Una fiesta es un balcón fuera del tiempo donde se puede disfrutar con normas diferentes, lejos del orden de los deberes”. 3

Toda esta teoría se ve reflejada en el comportamiento social de quienes viven el carnaval, donde no se ven riñas, ni muertos, las urgencias de los hospitales sólo atienden otro tipo de problemas de salud porque en esa κάθαρσις, kátharsis o catarsis como llamarían los griegos donde se expresan las emociones  hay una purga o purificación. También está la explicación del psicoanálisis que habla de la expresión de lo reprimido. En este caso del carnaval de Pasto, nos encontraríamos con una expresión colectiva de las emociones para olvidar, dejar de ser yo, entonces aquí es relevante hablar del dios como una figura que cambia en cada contexto, un ejemplo de ello es el teatro, cuando el actor deja el “yo” para ser otro.

El entusiasmo colectivo que se ve en las fiestas nos indica la necesidad de presentar la etimología de la palabra entusiasmo, así: “en” es una preposición que significa estar dentro, y theos, significa dios, a la luz de la etimología, significa llevar un dios adentro. Esta comunión se ve reflejada en la danza, en la alegría compartida y en el entusiasmo. Es costumbre conocida la del pueblo de Pasto, el regreso a lo apolíneo, al arte, a la contención, a la convivencia y a la civilidad que nunca se extravió durante el carnaval, porque además fue ejercicio de tolerancia.

En fin, que la capital de Nariño, regalada por Inti 5 durante estas fiestas que celebraron y exaltaron la palabra Kawsay se manifiesta como el festival más rico culturalmente de Colombia, no en vano, los líderes de las distintas comparsas se paraban ante el público para decir con orgullo: ¡Qué viva Pasto, carajo!

(1) García Gual, Carlos. Historia mínima de la mitología. Turner publicaciones, 2014 Madrid. P.102

(2) Zuleta, Estanislao. Arte y filosofía, invitación a la búsqueda. Editorial Planeta colombiana A,2020. P. 164

(3) Ídem,p.165.

(4) Íbidem, p.164

(5) El dios Sol de la mitología incaica

(6) Kawsay significa vida. Término de la cultura quichua.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
En Filbo 2024: el ABC del Cambio Climático

En Filbo 2024: el ABC del Cambio Climático

Nota Ciudadana
En Filbo 2024: ‘Colombia secreta', en las palmas de tus manos

En Filbo 2024: ‘Colombia secreta', en las palmas de tus manos

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--