Ubicada en Viani, la cascada el salto de la bruja, se esconde en medio de una exuberante vegetación. Para poder llegar hasta ella se debe emprender una aventura
Las Ventanas de Tisquizoque ubicadas en Florián, Santander, son un espectáculo natural que nadie debería perderse. Su caída de agua mide más de 300 metros
En Junín, Cundinamarca, se encuentra la cascada de Sueva o Nemustén con una caída de 50 metros de altura. Brota del bosque y rocas que le dan un toque mágico
Este mágico lugar está en Subachoque y para llegar se debe hacer una larga caminata en medio de la vegetación. Es un plan perfecto para disfrutar de la naturaleza
La Cascada Arenales hace parte del Parque Nacional Natural Serranía de La Macarena. Su imponente caída de 60 metros y su playa blanca la convierten en un oasis
En el municipio de Vergara, Cundinamarca, en medio de una imponente vegetación se alzan estos tres cuerpos de agua perfectos para relajarse y darse un chapuzón
