Belarmina Cardona tiene en su memoria que por parte de la administración municipal vinieron a sacarlos con mentiras de sus casas diciendo que solo estarían por fuera de ellas por tres meses, en este momento llevan casi seis años esperando y no pasa nada.
“Hasta ahora no nos han ofertado casas, ellos dijeron que iban a pagar todos los daños, pero nos robaron todo lo que dejamos. ¿Se han manifestado que no lo pagan? Nunca, ni nos han dicho le vamos a dar una casa o le vamos a arreglar su casa. Lo que quieren es que la hija mía acepte por esa limosna que están ofreciendo por la casa. Solo pedimos lo justo, pero dejaron a una pobre anciana de 87 años en la calle. ¿Será justo luego de tener nuestra vivienda? En la plancha tenía jardín, gallinas y ahora estoy metida en una cárcel disimulada, de lo único que tengo son las llaves para salir”, relata Cardona.
El 14 de agosto de 2019 vinieron a hacer un segundo avalúo de las casas que se agrietaron por la dinamita que pusieron para construir el Tranvía de Ayacucho, avalúo que dejaron vencer de la Lonja con el que habían ofertado. Anunciaron que se demoraba 15 días y luego de tres meses no lo han hecho. Cada vez que una parte incumple los términos se debe comenzar de cero otra vez el proceso.
La comunidad del barrio San Luis asegura que plusvalía es un tema que ha pasado desapercibido por el Metro y el Isvimed, que son las entidades encargadas de hacer el proceso de avalúo. Ellos manifiestan que les dijeron que la plusvalía no era para ellos, sino para otros. Es decir, el avalúo de sus casas posiblemente no cuente con las remodelaciones y valorizaciones que ha tenido el sector por las obras recientemente construidas.
“En septiembre del 2018 nos informaron que no nos iban a seguir pagando subsidio de arrendamiento, a parte de que nos sumaron las cuentas de servicio, impuestos, pagar arriendo, ir a otra casa a pagar otros servicios públicos. Ellos decían que necesitaban que un juez les diera la orden de que les protegiera sus derechos, en la actualidad esta comunidad de San Luis ha ganado alrededor de 25 tutelas salieron a favor de las personas”, asegura Rubén Darío Montoya, quien también se vio afectado por la obra.
Juana Cardona, quien ha sido una líder en este proceso explica la situación de la siguiente manera: “Esto es pura gentrificación, ellos creen que nosotros no tenemos con qué subsistir económicamente con los precios que van a adquirir estos terrenos. Esto es el ejercicio de la plusvalía, llegan a unos terrenos que tienen un valor muy bajo, encuentran a ciertos moradores que económicamente no tienen la capacidad para responderla a la lo que pide el terreno, entonces sacan a los pobres para que lleguen los ricos; ese es el ejemplo más claro de que la gentrificación en Medellín es un elemento utilizado para desplazar y vulnerar a los más pobres”.
Desde la administración municipal les habían informado que para el mes de diciembre de 2019 este tema iba a llegar a su final, pero aún no se ha podido concertar un acuerdo porque ellos exigen precios justos o que arreglen sus viviendas.
Rubén Darío Montoya afirma que: “Para esta administración que se va el 31 de diciembre nosotros nunca fuimos ni ciudadanos, ni encontramos quien nos debía atender. Las expectativas con el nuevo alcalde que tan si quiera nos preste la debida atención y nos proponga una solución. Necesitamos un precio justo, un lugar cómodo como éste y con lo que ofrecen nos tocaría desplazarnos a las laderas”.
En el año 2016 hubo una resolución de utilidad pública porque el sector presentaba riesgos supuestamente, en el polígono Z3R17 del POT, no se encontraba San Luis, pero sacaron una urgencia manifiesta para poder expropiarlos. Por el sector no se necesitaba que pasara la vía, fue un barrio con procedimientos técnicos equivocados. Debieron pagar las casas, pero el alcalde hizo este acto para justificar al Metro, en vez de pagar los daños.
Al enviarle un derecho de petición al Metro, por los procedimientos técnicos que realizó, éste manifestó que es información pública clasificada, por lo cual le negó la información a este medio alternativo para saber qué ocurrió en el sector. Sin embargo, en cuanto a la cantidad de personas expropiadas en este sector, aseguró que a la fecha de 65 bienes inmuebles adquiridos, van 8 predios a los que han accedido como consecuencia de expropiación por vía administrativa.
Miraflores: sale la comunidad para construir un parque al lado de otro parque
Si usted le pregunta a los vecinos o a las personas que se suelen movilizar en el Tranvía de Ayacucho pueden hablar maravillas de esta obra que moviliza cerca de 80 mil pasajeros al día, pero la mayoría de los habitantes hasta del mismo sector conocen la realidad que tuvieron que padecer los moradores del sector de Miraflores en Buenos Aires.
Juan Carlos Ríos, afectado por esta obra en el sector de Miraflores no termina de creer que la administración municipal y el alcalde lo hayan dejado sin su vivienda, y que se haya quedado sin su trabajo por estar pidiendo permisos para asistir a reuniones y exigir su derecho a una vivienda digna.
Recuerda que cuando su madre llegó al barrio compró su casa de tres pisos por 3 mil 500 pesos, hace ya más de 50 años, ella se llamaba Hermelina Hernández, él y su hermana aseguran que se murió de tristeza de ver como le quitaron su casa, por eso consideran que la consumió el dolor.
“Mi mamá era fundadora, ella nació en Santa Elena, trabajó en las casas de los Echavarrías Misas, con los centavos que recogió compró su terreno en el 60, se vino con mi papá, hasta que un día en marzo del 2011, cuando llevaban 50 años de casados, vinieron los del Metro a decirles que la casa no la necesitaban para esa obra. Estaba feliz porque iban a construir un tranvía como en el que montaba cuando era niña”, cuenta Juan Carlos Ríos.
Su casa la tumbaron el 3 de mayo de este 2019, sin haber pagado la casa. Le dieron 420 mil pesos de arriendo temporal, que terminaron siendo 380 mil pesos porque la Dian cobraba sus impuestos. Un arriendo cerca al sector vale un millón o un millón doscientos. Todavía les están debiendo la desconexión de lo servicios públicos. Supuestamente se lo iban a pagar a noviembre de este año, pero todavía no se lo han pagado.
“Dañen las casas, arreglelas aunque sea, pero no, paguen lo que es, pero tampoco. Ya les pagaron los 120 millones: 40 millones para mi hermana, 40 a mi padre y 40 para mí. En curso hay una demanda administrativa que inició en 2016, la cual no duró ni cinco minutos y le dieron vencimiento de términos, en este momento está cursando en el Tribunal Administrativo”, aseveró Ríos.
En Miraflores pagaron a cerca de 900 mil pesos el metro cuadrado, mientras que en las otras casas de ahí para abajo a dos millones vale el metro cuadrado. Las Lunas, los Chalarca, los Ríos, entre muchos otros vecinos extrañan su entorno familiar, otros no haberse endeudado por algo que ya tenían y otros preferirían no padecer por indemnizaciones que no representan sus intereses.
Paradójicamente recientemente la administración municipal anunció la inauguración del nuevo espacio público en Miraflores, que aún no ha terminado, el cual será un parque al lado de otro parque, donde casualmente desalojaron varias viviendas para el proyecto del Tranvía de Ayacucho, que ya se había construido.
