Profecías pasadas y predicciones futuras
Opinión

Profecías pasadas y predicciones futuras

¿Tendrá Casandra razón al ver los intentos de cambio del gobierno como la Caja de Pandora que solo males traerá? ¿Quién logrará que sus profecías se cumplan?

Por:
enero 22, 2025
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.

En la mitología griega, Pandora, fue la diosa creada como castigo para la humanidad, y la que, al abrir la caja que contenía todos los males y  liberarlos, fue culpable de todo lo malo que nos cae; y Casandra, que tenía la facultad de predecír todos los males, había recibido la maldición de que nadie le creería, aún si sus predicciones pudieran cumplirse. ¿Tenemos nosotros Casandras o Pandoras?

Al comienzo del gobierno -o más exactamente desde antes- este presentó las medidas que se proponía tomar y las expectativas que con ello se generaban; lo que se llamó la promesa del cambio. La oposición a su turno advirtió sobre las consecuencias nefastas que según sus análisis se derivarían. Coincidieron en el tiempo profecías optimistas y pesimistas.

Ambas pueden verse como correctas parcialmente según lo que esperaban, pero también con deficiencia en las proyecciones que hicieron: no se han logrado el ‘gran cambio’ ni la ‘Paz Total’, pero tampoco cayó Colombia en la catástrofe con la que nos amenazaban.

La oposición siente que ha triunfado en la medida que ha impedido que prosperen varias reformas y más la implantación del cambio de modelo como conjunto. Y a través de gran despliegue mediático hace resaltar los problemas de seguridad como el gran fracaso.

Hay poca discusión respecto a que el nivel de ejecución de algunos programas hasta el momento no ha sido satisfactorio. El gobierno mismo lo admite, pero lo explica señalando que no todo se puede atribuir a ineficiencia suya sino a circunstancias imprevistas algunas y/o producto de la intervención de la oposición otras.

Al mismo tiempo reivindica que no son pocos los resultados logrados hasta el momento.

Los datos estadísticos muestran una baja en todos los delitos excepto en las extorsiones. Y las cifras de detenciones, incautaciones de droga y de insumos, y de capturas de criminales son mayores que nunca.

En el campo económico, que suponía ser en el que de acuerdo a los expertos del establecimiento podríamos llegar caer en situación parecida a la de Venezuela, los resultados lejos de tender hacia una catástrofe han sido incluso superiores a lo previsto por el mismo gobierno:

                Los indicadores macroeconómicos muestran una reactivación sólida: Economía creció más del 2 %; desempleo bajó a un dígito; inflación a menos de 5.5%; para la OCDE es el sexto mejor entre los que califica; baja la deuda pública en más de 10 %; la vena rota del subsidio a la gasolina es cauterizada; etc.

                El turismo ha cumplido lo esperado por Petro con orden de crecimiento que alcanza 6,5 millones de visitantes y el agro (en buena parte por los aguacates que ridiculizaron cuando los mencionó Petro) pasaron a ser los impulsores de la economía, alcanzando órdenes de magnitud  de los ingresos petroleros (los cuales, contrariamente a la profecía opositora, no han disminuido sino aumentado)

                El aumento de ventas de carros, de motos, de viajeros, de restaurantes donde toca hacer reserva porque se llenan, los vehículos en cola para entrar a los centros comerciales; los cupos en los vuelos agotados; en fin, nada parece indicar que vamos hacia la  ‘Venezuelización’ que predicen nuestras Casandras. Hasta los consumos navideños se dispararon.


Nada parece indicar que vamos hacia la  ‘Venezuelización’ que predicen nuestras Casandras


Al mismo tiempo en lo social han salido estadísticamente de la pobreza 1.660.000 colombianos, y de la extrema pobreza más de 600.000. Las madres cabeza de familia reciben subsidio. La pensión mínima es garantizada para millones de ancianos; la Unidad Por Capitación (UPC)  para atender la salud se ha aumentado en 36,7 %, más de 15 % en términos reales después de la inflación; y si no se ha llegado al número de viviendas y la entrega de hectáreas fijadas como metas, sí el incremento del ritmo ha sido más que substancial respecto a lo que venía.

Casandra no puede reivindicar el cumplimiento de profecías pasadas pero sigue previendo catástrofes futuras. Abandonando ya los ataques a los cambios del modelo y los cuestionamientos ideológicos, se apoya en sus propias proyecciones, y cada vez más en que los vientos externos que soplan en estos tiempos son desfavorables (que lo son pues son fuertemente de derecha) y en que el peso de su representación política es capaz de impedir cualquier proyecto que venga de una propuesta de gobierno (díctum del presidente del Senado)

Al debate presente sobre las ejecutorias del gobierno o la falta de ellas que señala la oposición, se puede agregar entonces el que gira hoy alrededor del futuro y las predicciones que cada parte propone.

¿Tendrá Casandra razón al ver los intentos de cambio que promete el gobierno como la Caja de Pandora que solo males traerá? ¿Quién (oposición o gobierno) logrará hacer que sus profecías se cumplan?

Del mismo autor: Guerra de narrativas y de ideologías

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
La ´Democracia´: un fetiche o una opción real

La ´Democracia´: un fetiche o una opción real

La demografía en contra de la megalomanía trumpiana

La demografía en contra de la megalomanía trumpiana

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--