La atarraya no se lanza al mar para la foto. Pero sin la foto, los que no vivimos cerca al mar jamás habríamos visto la belleza de la atarraya al ser lanzada al mar.
Lo mismo sucede con todos los demás tipos de bellezas que provienen de aquellos lugares de los que no sabemos ni el nombre. Guapi, ¿lo has oído? López de Micay, ¿tampoco? Timbiquí, ¿ese sí? Por supuesto que los has oído. Se te vienen a la mente la gastronomía del Pacífico colombiano, la música de marimba, las olas del océano reventando contra eternas playas solitarias, la fortaleza de la raza negra y sus sonrisas de marfil.
También los has escuchado en los noticieros, a veces, especialmente cuando un líder o una lideresa son amenazados de muerte o asesinados, o cuando las voces intransigentes que ven siempre al país a través del filtro en blanco y negro de la desinformación se atreven a decir, con total desconocimiento de las realidades ajenas, “los tales defensores deben ser guerrilleros o miembros de algún grupo ilegal”. ¡La berraca estigmatización! ¡La berraca ignorancia!
Ante la dura realidad que afrontan los defensores de derechos humanos del Pacífico caucano, y que han afrontado durante años, la organización Pensamiento y Acción Social (PAS) y la Fundación Chasquis crearon la campaña ‘Atarrayemos el Cambio por un Sueño Pazífico’, cuyo objetivo principal es visibilizar a estos líderes y lideresas que habitan esta zona de Colombia.
Narcotráfico, desplazamiento, confinamiento, abandono estatal, homicidios, atentados, estigmatización… todos flagelos que no dan tregua en este paraíso del trópico y que hace tan solo menos de un año fueron corroborados de primera mano por una misión convocada por Pensamiento y Acción Social (PAS) y Protection International (PI), junto con la Coordinación de Consejos Comunitarios y Organizaciones Étnico Territoriales del Pacífico Caucano (Cococauca), y la cual fue integrada por una delegación de la Unión Europea, las embajadas de Alemania, Noruega, Italia, España, Francia, Gran Bretaña, Finlandia, Suecia, Bélgica, Países Bajos, la Misión de Verificación de la ONU en Colombia y la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia (Mapp–OEA).
Ahora, que si alguien prefiere creer que allá solamente lo que hay es guerrilleros y grupos ilegales y líos de faldas, ¿qué se puede hacer ahí para devolverle la vista a un ciego? Una pregunta ante la cual los integrantes de esta iniciativa han optado por no cruzar los brazos.
Por ello, conscientes de la urgencia de ser reconocidos y de sumar apoyo a su noble causa de proteger la vida, la cultura y la naturaleza en las tierras del ocaso enfurecido, el manglar y las mareas, los líderes y lideresas del Pacífico caucano han decidido lanzar un clamor a la sociedad, a esa sociedad que todavía se conmueve y siente como suya también la atarraya lanzada al mar en la foto.
Pero, ¿qué es y en qué consiste este clamor al que ellos mismos han bautizado ‘Atarrayemos el Cambio por un Sueño Pazífico’? Santiago Londoño, oficial de Comunicaciones de la organización PAS, nos lo explica en la siguiente entrevista, no sin antes invitarnos a ver y oír los contenidos multimedia de la web del proyecto, en donde son los mismos líderes y lideresas del territorio quienes toman la palabra.
¿Cómo nace esta iniciativa?
‘Atarrayemos’ nace luego de una experiencia exitosa parecida en el Magdalena Medio (‘Somos Como Tú’), donde vimos que la estigmatización a líderes sociales que sufren allá, también la sufren en el Pacífico. Entonces con los líderes y lideresas de esta región sabíamos que ese problema lo podíamos abordar desde la comunicación. Y en la creación de la campaña participaron líderes de los tres municipios del Pacífico caucano, que son Guapi, López de Micay y Timbiquí, y participaron también campesinos e indígenas del resto del departamento y de la Costa Pacífica, en donde hay varios resguardos.
¿Por qué el nombre?
Esas son palabras que son muy de allá. Nosotros le preguntamos a la gente ¿qué significa atarrayar para ustedes? Y ellos más que describir un simple acto de pesca, lo describieron como todo lo que implica ese acto, que es trabajar juntos, en comunidad, en familia, salir a realizar una actividad sin hacerle daño a los demás y de la cual todos puedan vivir. Y por otro lado la palabra Pazífico viene del sueño de las personas de la zona, que tienen la convicción de construir un Pacífico sin violencia, tranquilo, saliendo adelante mediante economías distintas sin dañar el medio ambiente y del buen vivir. Lo decían los indígenas así: “hay que rescatar este Pacífico con tantas cosas buenas que se han perdido por situaciones del conflicto”.
¿Cómo es la situación actual de los líderes sociales en esta región?El departamento del Cauca es el segundo o tercer departamento que más asesinatos de líderes registra en el país. Y esta región de la Costa Pacífica tiene un problema que empeora esto, y es la cantidad de casos que no se denuncian. A eso se le llama el subregistro. Entonces pasan los asesinatos y los ataques y la gente por falta de confianza en las instituciones y ante la dificultad para movilizarse pues no denuncia. Por eso, las cifras del Cauca que de por sí ya son bien graves, en la Costa Pacífica son peores si se tiene en cuenta que no están quedando registradas. Además, vemos que una de las causas de esos ataques es por el tema de la estigmatización y por la falta de reconocimiento de los liderazgos. Es toda una lucha hacer que la gente entienda la labor que realizan los líderes sociales y hay que luchar contra un montón de discursos falsos como que el líder está ahí porque quiere ganar plata o porque lo puso un político o hasta se llega a decir que los líderes son guerrilleros, cosas que no tienen nada que ver con la realidad. En general, hay un ambiente hostil en contra de ellos. Por eso esta iniciativa busca cambiar esos imaginarios por cosas positivas que reflejen mejor la realidad.¿Cómo se enfrenta la estigmatización?Lo que hace la campaña es mostrar la cotidianidad de los líderes sociales, su lado humano, el lado positivo que muchas veces no se reconoce. La idea es visibilizar su labor. Queremos mostrar que ese líder no está ahí porque apareció mágicamente en ese lugar, sino que posee una historia de vida que tiene que ver con sacar a su comunidad adelante o porque quiere solucionar un problema específico que afecta a su familia, a su comunidad. Y que ese líder, además de ser líder, sale a pescar todos los días y es madre y es padre y es hermano de alguien, como cualquier otra persona de su comunidad. La gente cree a veces que el líder es alguien distinto y ahí se pierde la noción de que es mucho más parecido a mí de lo que yo me imaginaba. Y la otra estrategia es crear lazos, integrar los liderazgos entre Guapi, Timbiquí y López de Micay, y los liderazgos afros con los liderazgos indígenas y a las instituciones también con los líderes para que haya un reconocimiento general y se pueda trabajar en conjunto a una escala mayor.
¿Por qué es importante apoyar a los líderes sociales del Pacífico caucano?
Porque esta es una región enormemente diversa y enormemente rica que tiene a estos guardianes que son los líderes sociales, y a quienes tenemos que apoyar para que precisamente esa riqueza se mantenga y no se pierda y así todos podamos disfrutar de ella hoy y en el futuro
