La raza superior en seis actos
Opinión

La raza superior en seis actos

Las gitanas rumanas y los esbeltos muchachos holandeses en la previa de un partido de Champions

Por:
marzo 18, 2016
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.

Acto 1. Plaza Mayor de Madrid en un agradable y soleado día de un invierno que cuenta sus últimos días. Juega en la noche un partido de la Champions el Atlético de Madrid contra un equipo holandés cuyo nombre se omite por simple olvido. Los bares del lugar tendrán cincuenta mesas para que el turista se siente y pueda gozar de una caña con unas tapitas de tortilla. Y por cosas del turismo, las cincuenta mesas están ocupadas por seguidores de aquel equipo de fútbol del país de los girasoles y si en cada mesa redonda caben a su alrededor seis sillas, digamos tanteando que había gozando de la fiesta unos trescientos fans del fútbol.

Acto 2. Si se detiene uno a ver a los agradables turistas, pronto cae en cuenta que un ochenta y siete por ciento son jóvenes de no más de treinta años, bien vestidos y, son universitarios o prósperos trabajadores.  Hablan al menos dos idiomas, ya que piden sus bebidas en inglés o español y solo entre ellos hablan en holandés. Jóvenes civilizados, en suma.

Acto 3. Serán las doce del día y a todos les une el deseo de una victoria en su partido y el calor del alcohol ibérico que calienta los ánimos, y no puede ser otro el momento para recordar una máxima de Primo Levi, luchador antifascista y víctima del terror nazi cuando se preguntó.: “Estos son los hechos, funestos, inmundos y sustancialmente incomprensibles. ¿Por qué, cómo llegaron a producirse? ¿Se repetirán?”.

Acto 4. Aparecen seis o siete mujeres gitanas, deben ser rumanas quienes, ataviadas con muchas prendas se acercan a las mesas a pedir limosna.

Y lo que viene a continuación refuerza las dudas de Primo Levi.

Uno, o dos o tres tienen la maravillosa idea de lanzarles al piso monedas y las gitanas corriendo a perseguir la monedita. El chiste causa risas y lo que a continuación se ve es a todos los holandeses buscando en sus bolsillos pequeñas monedas para lanzarlas al suelo y ser espectadores de la trágica escena de las rumanas como locas por los suelos buscando monedas perdidas. Y todos los holandeses, sin excepción, gozando de la obra teatral.

Acto 5. La pieza se cierra cuando un joven holandés se aleja de las mesas y se acerca a las mujeres. Introduce su mano al bolsillo y de ahí extrae un billete que, imagino debe ser de pequeños cinco euros y, como si fuera un mago, le prende fuego y se lo lanza a las mujeres quienes finalmente logran obtener un chamuscado papel, cuando otro holandés hace flexiones en el piso invitándolas a cambio de moneditas a imitarle, lo cual logra con éxito.

Acto 6. Las gitanas no se habrán dado cuenta del divertimento de los esbeltos muchachos quienes felices saldrán a otro lugar de Madrid a burlarse de lo que piensan ellos son razas inferiores y termino con otra frase de Primo Levi cuando se pregunta: “¿Qué hacer ahora? ¿Cómo desprenderte de ti mismo? Con cada obra que nace mueres un poco”.

Bueno, por fortuna ocurrieron dos cosas muy buenas. La primera, en esas tristes horas ningún español fue partícipe del teatro; es más, una mujer se acercó retadoramente donde las gitanas y algo les dio. La segunda, el Atlético ganó.  ¡Aupa el Aleti!

… y hablando de…

Y hablando de teatro, qué tristeza da ver a esta nueva izquierda bolivariana aupada en el delicioso pastel de la corrupción y ver a Lula montarse otra vez en el poder para alejarse de las garras de la justicia. Y más tristeza es ver a Samper Pizano, el de la espalda de elefante quien le da sus amargos votos de confianza. Triste que a uno lo apoye un ser como este, quien fue presidente gracias a ocho mil millones de millones de la mafia y a quién, lógicamente, nunca le ocurrió nada.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Por suerte casi los mato

Por suerte casi los mato

Celos de hombre (II)

Celos de hombre (II)

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--