A propósito del horror que vivimos en estos días en Colombia, entra en vigencia el trabajo de Erika Diettes exhibido actualmente en la Galería virtual Aurora, espacio para arte y diseño, cobijada bajo el portal ArtNexus. Esta exposición, Relicarios, vincula víctimas de muertes violentas con los rastros que dejaron: una camiseta de hincha, una ruana, una fotografía o una cédula, una mochila o un pañuelo que alguna vez pertenecieron a los tantos muertos y desaparecidos que este país ha producido durante tantos años. Erika recoge con los familiares algún objeto y con todo respeto y nitidez lo encapsula en capas de tripolímetro de caucho que forman un Relicario símbolo de tumba, de memoria, de dolor, de ausencia y de recuerdo. No es este un trabajo para nada fácil, manejar los símbolos que envuelven no solamente al muerto o desaparecido sino también a sus familias, a los dolientes.
Las obras de Diettes inspiran un sentimiento: el desprendimiento del ser querido, el rostro que se ha perdido, así como momentos específicos que quedado recluidos en la nostalgia, el zapato hecho a su medida y tamaño, la camiseta de su afición, los pergaminos de su oficio, el dolor de su ruana, el amor de una carta, el olor de una almohada, el sudor del miedo. Circunstancias con las que la artista hace una composición de momentos perdidos pero venerados por ser lo único que quedó de ellos tras una muerte inesperada, y el dolor traumático que deja. La historia repetida en diferentes contextos todos violentos, que parece no encontrar una reflexión que detenga este eterno matarse entre hermanos que ha sido la historia de Colombia.
En el conjunto la exposición deja el angustioso vacío de la espera sin respuesta del desaparecido, y también el dolor profundo de la despedida del muerto, todo resumido en un relicario, todo vigente en estos días en que tantos han perdido a tantos.