El precandidato tenía 31 años, iba en un bus y vio el carro de su papá, el senador Manuel Cepeda, y ante sus ojos estaba la tragedia que le cambió la vida
J. Glottman convirtió la palabra “confianza” en un negocio. Durante medio siglo vendió electrodomésticos fiados hasta que la fe en sus clientes se volvió deuda