La familia de Jorge Enrique Pizano alista baterías para que la Fiscalía reabra la investigación de la muerte del controller de Odebrecht y el caso se considere como un homicidio. El penalista Miguel Ángel del Río será el abogado representante de víctimas y desde ya aseguró que los responsables pagarían ya que se destapará la verdad detrás de la extraña muerte tanto de Jorge Enrique Pizano y su hijo Alejandro.
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El abogado Del Río intentará probar la teoría, que tanto padre como hijo fueron envenenados con cianuro aportando nuevos elementos para establecer que no fue un accidente ni una muerte natural como lo estableció la Fiscalía de Néstor Humberto Martínez en su momento.
Jorge Enrique Pizano, quien fue controller de la concesión Ruta del Sol -y empleado de Luis Carlos Sarmiento Ángulo al ser dueño de Corficolombiana contratista de la obra- se convirtió en testigo clave de la corrupción dentro de Odebrecht y estaba listo para señalar a los responsables de las coimas que se movieron entre públicos y privados alrededor de la concesión. Sin embargo, pocos antes de revelar la corrupción murió en extrañas circunstancias. Días después su hijo Alejandro Pinzano moriría en el mismo lugar: su finca en Subachoque.
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