Valledupar: la ciudad desvencijada

Valledupar: la ciudad desvencijada

Hay 27 invasiones en Valledupar (hay vía libre para invadir), la ciudad es un basurero a cielo abierto, cualquier sitio es apto para arrojar basuras

Por: Aurora Elena Montes Rebollo
diciembre 22, 2021
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Valledupar: la ciudad desvencijada
Foto: Cortesía

Hace unos años escribí una pesimista nota sobre Valledupar esperando que el mal momento que vivía la ciudad no fuera sino un bache que sería superado por acertados actos de la administración de turno. Hoy escribo nuevamente para decir que las cosas están peor.

Vivir la ciudad en el día a día resulta un ejercicio que va desde el fastidio hasta la pesadumbre. La inseguridad que azota a la mayoría de ciudades del país en Valledupar cobra fuerza, no sólo es el atraco callejero, a las viviendas, también se cometen atracos nunca antes vistos en la ciudad (en centros comerciales), se asesina para robar, vidas truncadas en una ola de inseguridad que nos tiene acorralados. ¿Y las medidas de la administración municipal? Ninguna.

Hay 27 invasiones en Valledupar (hay vía libre para invadir), la ciudad es un basurero a cielo abierto, cualquier sitio es apto para arrojar basuras: lotes, orillas del río, bulevares, andenes, calzadas, ciclorrutas, parques.

La otrora ciudad limpia hoy está convertida en un muladar. Las calles con sus andenes no soportan un hueco más, enormes cráteres deben ser esquivados a diario por conductores y peatones. El espacio público está invadido por toda clase de vendedores que resulta un acto de malabarismo transitar por la calle del Cesar y sus alrededores.

El rebosamiento de manjoles es un recordatorio diario del atraso, es urgente un sistema eficiente y moderno de alcantarillado tanto para aguas servidas como pluviales.

Las normas de tránsito no existen en la ciudad, las irrespetan todos, el incumplimiento alcanza su clímax con los motociclistas quienes se pasan semáforos en rojo, no se detienen en los pares, son los nuevos usuarios de los andenes, los peatones debemos cederles el paso.

Anteriormente hubo algunas medidas como la restricción para motociclistas en el centro de la ciudad, el miércoles sin moto y el sábado sin parrillero, con ellas había una mejor movilidad, todas estas medidas las tumbó el actual alcalde Mello Castro.

En estos momentos la percepción de los ciudadanos es la de vivir en una ciudad donde reina la anarquía, cada quién hace lo que quiere, es la ley del más vivo.

Ya no hay convenio para el control de tránsito con la policía, hay 10 agentes para controlar el tráfico en una ciudad de 500.000 habitantes, la gente poco respeta a los policías, ¿se imaginan lo que respetan a los agentes municipales?

El señor alcalde ha hecho anuncios que al sol de hoy ninguno es una realidad: la mentada escombrera municipal, la supuesta solución para que no sigan arrojando basuras en cualquier parte, el centro de bienestar animal para la protección de los animales callejeros, incluidos los equinos que sufren las inclemencias del maltrato y la desidia de la administración, la pavimentación de las calles (sólo un tímido trabajo de pavimentación en un sector).

La ciudad se cae a pedazos, los jóvenes quieren irse, aquí no hay nada que hacer. ¿ Y dónde está la dirigencia? ¿Hay concejales? Parece no importarles el rumbo que ha tomado la ciudad. Necesitamos un cambio YA

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
Síndrome de Estocolmo: el alimento de la corrupción en Colombia

Síndrome de Estocolmo: el alimento de la corrupción en Colombia

Nota Ciudadana
En el Caribe comes o pagas energía

En el Caribe comes o pagas energía

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--