El Tigre no deja de poner mensajes apoyando a todos los deportistas colombianos en Tokio 2020. También lo hizo en la Copa América. ¿Y James por qué no pone nada?
Lo trajeron como el gran sucesor de Pékerman y fue un fracaso rotundo. Tuvo que irse a Medio Oriente, donde lo adoran, para relanzar su carrera de técnico
El fanatismo ridículo en Colombia por el fútbol traspasó fronteras y llegó a Norteamérica. La imagen que queda después de cada suceso así es lamentable