“Quotes”
Opinión

“Quotes”

Por:
febrero 23, 2015
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Es un oficio que alguien tendrá que hacer. Como hace tantos años con las tales tarjetas Hallmark, la tarjetas que se veían sobre todo en las películas  o a veces en una papelería elegante, con un “Eres una mujer maravillosa”, o un “Al mejor de todos en su día” y cosas así, desplegables, aparatosas, coloridas. Un detalle. Nunca tuve una de esas, pero cumplían su función de plasmar un mensaje universal, preordenado, para alguien particular. Estaba la versión local Timoteo, también. ¿Se acuerdan? Supremamente cursis, con unos muñecos que todas las niñas de 10 años sabían (mos) pintar.

Pues bien, las generaciones pasadas tenían tarjetas impresas masivamente, aparatosas y de colores para corroborar  y confirmar sus sentimientos más agradecidos, o felicitativos (me dice Word que la palabra no existe, pero se entiende), para poner ese picor en el corazón o en el estómago o dónde picara en un papel y poderlo regalar. No es fácil traducir las piquiñas en tres o cuatro palabras y además está el detalle de la tarjeta, que con un esfero se podía llenar a mano y ponerle otros datos (“Con cariños de tus abuelitos. Linda/o, que ha sido el año más feliz de mi vida. Ps: lo puedes cambiar si no te gusta o no te queda) Y, además por un precio extra con un desplegable en 3D, como algunos cuentos infantiles. Llegaban, además, muchas veces por correo o se dejaban en portería o se tiraban por debajo de la puerta. ¡Te llegó algo! Le gritarían a uno —emoción— y después se ponía en el cajón de las cartas, se colgaba en la pared, se ponía en la mesita de noche. Después de llamar a dar las gracias, claro.

Pero de esas ya hay más bien pocas. Lo nuevo son los quotes que migran de Pinterest a Facebook y así. ¿Si han visto? Las puede uno mandar por inbox o por Whatsapp y así. Pero, ¿quién las hace? ¿Cómo, dónde, por qué? ¿Quién busca lo que dijeron Einstein y Martha Angelou y la Biblia y Las mil y una noches o ve películas y la para cuando hay una frase inspiradora y recoge esas cuatro palabras que definen tan bien los picores de nosotros que somos tan existenciales? (Nos dicen “millenials”… ¿será que en verdad somos los primeros 20tantos tan dramáticos?) Yo sé, por ejemplo, que hay páginas como Brainpickings que recopilan cosas cheverísimas y a algunas le sacan su medio infografía… ¿Pero serán todas así? ¿Corroboran los datos? O serán muchas como ese chiste que dice que “Lo malo de las citas de Internet es que es difícil confirmar su autoría. Atentamente, Abraham Lincoln”.

Creo que es un fenómeno interesante, eso de tener un tablero (virtual) en alguna parte atiborrado de citas que, de alguna manera, nos dicen de distintas maneras que todo va a estar bien. Me da por pensar que uno de esos rasgos distintivos humanos es el miedo existencial, no creo que los animales lo tengan. (Creo que el rasgo distintivo que quienes saben de esto han identificado es en realidad la palabra y la posibilidad de que eso nos permita imaginarnos mundos. Creo que el miedo existencial posadolescente este es la posibilidad de imaginarse muchos mundos poco chéveres).

En fin, y a lo mejor todas las generaciones y cada cual tienen su manera de enfrentar esa incertidumbre. Nosotros con citas rebotando por nuestros newsfed y así, y antes con tarjeticas de Hallmark (que si que te quieren, que todo va a estar bien), o con recortes de sabiduría popular, textos sagrados, etc…

Y yo por eso me pregunto si habrá una mente brillante detrás de las citas inspiracionales estas, una que todo lo sabe y lo plasma en frases que caben en una postal. (¿Y que además les hace el diseño?) Como la mayoría de esas citas son lugares comunes, pero qué le vamos a hacer, son reafirmativas,  tal vez lo que hay detrás es más sencillo. De pronto es que a lo mejor todos somos muy iguales y, en el fondo, cuando no tenemos nada demasiado grave que nos preocupe (hay gente en un régimen totalitarista o lidiando, en serio, por tener qué comer) nos desvela algo muy parecido, la misma incertidumbre . Y así, pegarle a lo que necesitamos oír no es tan difícil. Que a veces es mejor irse que quedarse. Que si no se lo puedes explicar a un niño de 6 años es que no lo entiendes aún (¿Atentamente Einstein?) Que el tacto es el arte de hacer un punto sin hacer un enemigo (¿Atentamente Isaac Newton?).  De pronto quien hace estas citas hace las que necesita leer. Un poco como yo, cuando escribo aquí.

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