El Presidente de Aviatur, uno de las agencias de turismo más grandes del país fue el anfitrión de un almuerzo en su casa en los cerros orientales de Bogotá, al que asistieron miembros de la comunidad judía y cuyo invitado central fue el senador y seguro candidato presidencial Gustavo Petro.
La invitación causó revuelo y le llovieron críticas a Bessudo quien en esta conversación explica que siempre ha estado cerca del poder, razón por la cual pasa incluso por “lagarto” y defiende la importancia de relacionarse con gobernantes y políticos. Gustavo Petro, quien es el favorito en las encuestas para la Presidencia del 2022 no podía ser la excepción, y había que oírlo, como explica. La polémica reunión llegó incluso a los oídos del duro y abiertamente de derecha Primer Ministro Netanyahu, en a lejana Telaviv, en Israel.
Juan Manuel Ospina: Jean Claude llegaste a la escena de la coyuntura por el almuerzo con Gustavo Petro. Se tiene siempre la impresión que los políticos buscan a los empresarios para que les den plata para sus campañas y los empresarios a los políticos para que les hagan favores, se repitió con Petro, en la reunión en tu casa? ¿Cómo fue la cosa?
Jean Claude Bessudo: Me eligieron presidente de la Confederación de Comunidades Judías de Colombia y nos toca atender los temas de las comunidad con los estamentos colombianos. Me ha tocado siempre verme con mucha gente en cocteles y reuniones y hablar con todo el mundo. El grupo asesor de Gustavo Petro me solicitó una reunión con las comunidades judías de Colombia y me pidieron que si podía hacerse un almuerzo en la terraza de mi casa, y la verdad, no le vi ningún problema. No fui mas allá, ni hice ninguna interpretación. Hemos hecho almuerzos de la Confederación con todo el mundo, desde Santos hasta a Uribe. Han estado políticos de todas las líneas políticas en mi casa. Para mi esto no es extraño.
JMO: Pero además eres un buen actor, capaz de moverse en cualquier escenario. Pero cuénteme, cómo fue la conversación con Petro?
JCB: Lo recibí como anfitrión, palabras mías, palabras del embajador de Israel y Gustavo Petro tomó la palabra y a almorzar. Fue un almuerzo Kosher
JMO: Pero además te mueves bien en el poder. No te resulta algo nuevo, mezclas actividades empresarial y poder.
JCB: Si, como todo un lagarto profesional…
JMO: Pero hablemos de eso, como ven los empresarios el poder?
JCB: Yo vivo en Colombia desde 1960 y sin embargo sigo con este acento francés y muchos no me lo perdonan, hasta Felipe López que fue mi compañero de clase, me lo reprocha. Con tantos años, uno termina conociendo a todo el mundo; conocí a Belisario Betancur desde que era ministro de trabajo y luego de Presidente. También conoci a López, los he conocido a todos. La gran ventaja de Colombia es que la gente te escucha, te escuchan a cualquier nivel. Tu puedes pedir cita sin conocer las personas. Hay mecanismos gremiales para exponer una idea. Te atienden en el Banco de la República, para temas cambiarios, cuando ha habido problemas, en cualquier parte. Y en Colombia la relación entre el empresariado y el poder es fluida. Siempre te escuchan.
JMO: ¿ Eso es lo que se necesita precisamente en este momento de crisis?
JCB: ¿Cuántas veces lo ha dicho Bruce McMaster, se lo ha dicho al Presidente? Estuvimos con el presidente Duque en Palacio tocando los temas y no pasó nada.
JMO: ¿Cómo así que no pasó nada?
JCB: Hubo una reunión en Palacio con el comité de crisis y se levantó todo el mundo y hubo declaraciones de los asistentes, y no pasó nada. Con todo respeto, el Presidente ha debido haber dicho, nadie se me levanta de acá hasta que no estén de acuerdo. Hasta que no resolvamos la crisis, como hacia el Presidente Uribe.
JMO: Lo que usted cuenta de la reunión con empresarios, parece calcado de lo que dicen los del Comité del paro
JCB: Como le cuento, en la época de Uribe, cuando tuvimos un problema, después de intentar solución con el Ministro de transporte Andrés Uriel Gallego no mandó a hacer una cadena de oración, terminamos en la Casa de Nariño. Abordó el tema sin rodeos. Muy pragmático y nos dijo: se me reúnen al lado de mi despacho y de aquí no sale nadie hasta que no resuelvan sus problemas. Y nadie los deja salir hasta que no estén de acuerdo y cada uno se paga su sanduche, hasta que termine. . Así es como se manejan estas vainas. Se está quemando el país, hay que apagarlo ya.
Y que quede claro, nosotros estábamos para oír a Petro no para adherir a él. Estamos abiertos a oir todos los candidatos.
