Guido Nule, el mayor del clan, obtuvo el beneficio de casa por cárcel el pasado septiembre de 2015. Permanece en su apartamento de Barranquilla, activo con el que hacer local a través de su cuñado el alcalde Alex Char. Sus primos, Manuel y Miguel Nule, pagan condena en una cárcel en Corozal, Sucre por los delitos de concierto para delinquir y cohecho. Los tres comparten además una condena a 14 años por el delito de peculado en el marco del llamado carrusel de la contratación en Bogotá que llegó a su cúspide en la alcaldía de Samuel Moreno, también condenado.
Sin embargo las deudas todavía los persiguen. Más de 50 personas y empresas se acreditaron como víctimas ante la Superintendencia de Sociedades, una vez el Estado tomó el control de sus empresas buscando recuperar su dinero para pagarles a sus acreedores. La deuda con los particulares supera los $70 mil millones de pesos y la mayoría de las cuentas por pagar provienen de préstamos por los cuales recibían intereses superiores a los del mercado financiero y con los que apalancaron sus negocios particulares.
En el momento en que los Nule manejaban su emporio de construcción recogieron dinero en todo el país, hasta que su firma matriz, la sociedad Gas Kapital, se declaró quiebra y fue intervenida por Superintendencia de Sociedades. Cinco años después, el proceso de liquidación y de ubicación de activos dentro de una gran telaraña de empresas que construyeron en Colombia y en el exterior con la asesoría de grandes bufetes de abogados, no ha llegado a un feliz término y los deudores siguen a la espera.
El liquidador Pablo Muñoz, el mismo de Interbolsa y de la sociedad DMG, firmas intervenidas en cuya liquidación y pago de deudas tuvo éxito, no ha corrido con la misma suerte. El proceso ha sido más engorroso y según algunos de los acreedores, Muñoz ha estado reacio a explicar las razones por las que no se ha hecho efectivo el pago de estas deudas.
Su única argumentación es que la Fiscalía embargó $13 mil millones de la sociedad de los Nule y esos recursos están congelados y no se han podido liberar para pagar a los tumbados por los Nule. Además, algunos de sus bienes están en poder de la Sociedad de Activos Especiales SAE que remplazó a la Dirección Nacional de Estupefacientes.
Pero se sabe que los Nule aún tienen recursos con los cuales responder. La sociedad GAS Kapital, en la que los primos tenían su mayor participación accionaria, fue propietaria del 50 por ciento de la empresa de energía del Tolima Enertolima y de Enerpereira, a través de la holding Kapital Energy, donde compartían sociedad con el empresario Alberto Ríos. Aunque los Nule y Alberto Rios, en papeles ya no tiene una sociedad, se sabe que Gas Kapital sigue siendo propietaria de buena parte de Enertolima y la Empresa de Energía de Pereira.
En la lista aparecen personas de la elite política local y regional; bancos, aseguradoras y empresas que de momento no encuentran respuesta ni explicación satisfactoria. Este es el listado; el valor reclamado; y el que debe reconocérsele a los diferentes ´´tumbados´´ por los Nule.
