El gobernador de Sucre Edgar Martinez se estrenó en enero del 2016 con la firma del contrato del programa de alimentación escolar. Un contrato por 14.548.236.096 millones que ratificó el control que el paisa Adolfo Ramírez ha logrado a través Corporación Regional para la Construcción Social las raciones que reciben los niños de Sucre, que lo deja a él y a los políticos que lo apoyan contentos por las ganancias, pero insatisfechos a los niños y los padres de familia por la calidad que ofrece. El gobierno paga $1.200 por una ración de comida, pero lo que el precario plato que le entregan a los estudiantes no vale más de una tercera parte.
Para lograr este contrato Ramírez se alió con la Fundación para el desarrollo del Caribe y formaron la Unión temporal Construyendo bienestar con Mildred del Carmen Bireva como representante legal y lograron ser los únicos proponentes. La gobernación no hizo esfuerzos por buscar otras propuestas que permitiera comparar precios, calidad y servicios y el gobernador no solo firmo el contrato inicial sino que éste fue adicionado con un Otro Si a la misma Unión temporal por un valor de $ 1.396.911. 851 en noviembre del año pasado.
Son tantas las dudas que existen sobe la Corporación de Ramírez, que nació con un capital de $10.000 en 2011 y a los cuatro años estaba firmando un contrato superior a $10.000 millones en el 2015, para la alimentación escolar de los niños sucreños que fue tema central de la jornada en la fiscalía el 17 de noviembre del 2016 en el lanzamiento del programa contra la corrupción Bolsillos de Cristal y la justicia le tiene puesta la lupa a partir de las denuncias del ciudadano Luis Alfonso Alvarez.
Sin embargo al alcalde de Sincelejo Jacobo Quessep esto no le importó. Este viernes 7 de Abril, frente a la sorpresa de todos y sin considerar las objeciones, le entregó a la misma Corporación, siguiendo el mismo formato de proponente único, le adjudicó un contrato por 10 mil millones con Sincelejo y el de la gobernación por un monto cercano a los 19 mil millones para la alimentación escolar delos niños de la ciudad.
El gobierno paga $ 1.200 por cada ración que incluye desayuno y almuerzo pero Ramirez ofrece una precaria alimentación que le deja un alto margen de ganancia que queda en varias manos
Con este nuevo contrato Adolfó Ramirez se coronó como el dueño de la alimentación escolar de los 95 mil niños sucreños. Hace diez años, este paisa nacido en Medellín , era un desconocido en Sincelejo que logró dispararse meteóricamente hasta convertirse en uno de los grandes contratistas públicos de la región. Su mentor, el ex representante Yahir Acuña, quien le dio el impulso inicial para hacerse a los primeros contratos forma parte del pasado porque Ramirez Godoy se arrimó a un nuevo árbol para recibir la sombra. Logró el respaldo de los congresistas liberales Mario Fernández Quessep y Héctor Olimpo, actual secretario del Partido Liberal, una ruta de llegada para el también liberal alcalde Quessep.
Ramírez llegó de Antioquia a mediados de la década pasada sin un peso en el bolsillo. Su único capital era la cercanía con el entonces representante a la Cámara Yahir Acuña, quien para la época era el amo y señor de la política en Sucre y una figura en ascenso en el escenario nacional que lo llevó a ser el Presidente de Comisión de acusaciones de la Cámara de Representantes desde donde ejerció su poder a diestra y siniestra.
Su primera movida para entrar en el enredado pero lucrativo juego de los contratos públicos del departamento fue con la creación en el 2011 de la Corporación Regional para la Construcción Social, con un objeto social amplio: liderar estrategias que tengan como fin mejorar las condiciones de vida de las comunidades de Sucre
El ex representante Yahir Acuña fue el mentor de Adolfo Ramirez y le dio el impulso inicial a la Coporación regional para la construcción social
La coyuntura para darle vida a la Corporación creada por Ramirez con un mínimo de capital de $10.000 y acceder a los contratos públicos era la precisa. El representante Yahir Acuña había logrado como representante a la Cámara en el 2010 pesar en la política nacional y la mermelada del gobierno de Santos para asegurar la coalicion de gobierno de cara a la reelección necesitaba el concurso de las regiones y las oportunidades se ponían en bandeja. Acuña lo sabía. Su elección como Presidente de la Comisión de Acusaciones en 2014 le dio aun más poder y logró la confianza del Presidente, condición que le permitió direccionar contratos y nombramientos hacia Sucre, su tierra.
La reelección de Santos en el 2014 reafirmó aún más su poder y la llegada de Gina Parody al Ministerio de educación, multiplicó los recursos para la educación, incluido el Programa de alimentación para la educación escolar. Los escándalos por los despilfarros y la corrupción en los recursos destinados a la alimentación de los niños en la Guajira y en el Cesar le prendieron las alarmas al gobierno nacional. Aunque la ministra se propuso inyectarle trasparencia a los contratos PAE e hizo un recorrido por las regiones, las barreras de los políticos y gobernadores se hicieron sentir. Sucre no fue la excepción con el gobernador Julio Guerra Tulena, quien perdió el control de la administración y le delegó el poder a su esposa Maria Victoria Sotto.
Su sucesor, Edgar Martínez, estructuró la licitación, en la que la Corporación del paisa Ramirez terminó ganando como única proponentes. Sin experiencia, sin tradición en el servicio ganó sin que ninguna entidad de Sucre se hubiera postulado, a sabiendas quizás de que las cartas estaban marcadas. El gobernador Edgar Martínez quien había llegado con el apoyo de Vargas Lleras y su brazo político en la costa, el alcalde de Barranquilla Alex Char quien había derrotado a la Milena Jaraba, la esposa de Yahir Acuña, firmó el contrato por 10 mil millones que lo posicionó en el negocio de las raciones escolares.
Con el contrato en la mano y en ejecución, el paisa Ramírez empezó a prepararse para quedarse con la alimentación de los niños de Sincelejo y para renovar el contrato con la gobernación del PAE en el 2017. El escenario político había cambiado y entendió que su aliado Yahir Acuña era asunto del pasado y que debería buscar apoyos parlamentarios para acercarse al alcalde liberal Jacobo Quessep. No fue difícil. Encontró la ruta a través del anterior alcalde Jairo Fernández Quessep, del Partido de la U y aliado de Yahir Acuña cuando era su socio, quien además era primo del alcalde. Acuña, en sus tiempos de grandes ligas políticas, había sido también el contacto con dos liberales claves de cara al alcalde: el senador Mario Fernández y Hector Olimpo, el director nacional del Partido Liberal.
El senador Mario Fernández y el secretario del Partido liberal Hector Olimpo son los nuevos aliados de Ramirez en el PAE
Las fichas se movieron bien. La Corporacion regional presentó su propuesta para el PAE de Sincelejo y de nuevo, con el mismo formato de proponente único y sin consideración alguna de las críticas por la mala calidad de las raciones y los cuestionamientos de la Fiscalia, el paisa Ramirez y su corporación fue escogida. Este viernes´7 de abril el alcalde Quessep firmó el contrato.
Pero este 7 de abril ocurrió algo más grave aún para los 95.000 niños de Sucre. El gobernador Martinez cerró la licitación para la renovación del PAE 2017 que tendrá un valor de $18. 983. 148 millones del PAE, dejando dos fundaciones como finalistas: la Unión temporal niñez saludable Sincelejo y obviamente la Corporación regional para la Construcción social que aspira a quedarse por segundo año consecutivo. Según una fuente de Sucre la otra ONG oferente son amigos del propio Ramirez y del propio alcalde, un simple espejismo para demostrar que si hubo transparencia.
La celebración del paisa Ramírez y sus compadres políticos, el senador Mario Fernández Quessep y Héctor Olimpo Espinosa, coincidió con el inicio de la gran fiesta de la Semana Santa en la Costa Caribe Colombiana.
