Es hora de reparar el daño que hemos causado

Es hora de reparar el daño que hemos causado

Llegó el momento de examinar nuestras acciones y tomar medidas. La naturaleza no es lo único que el hombre ha estropeado...

Por: Laura Valentina López
abril 23, 2020
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Es hora de reparar el daño que hemos causado
Foto: Pixabay

Soy parte de una generación privilegiada, a la cual no le ha tocado pasar momentos tan difíciles en la historia de la humanidad como tal vez a algunos de nuestros padres o abuelos, digo no tan difíciles porque tristemente el panorama de nuestro país nunca ha sido tan alentador como para decir que han sido buenos.

Ahora recuerdo las historias de mi abuelo recorriendo los montes del Sinaí en Egipto, junto a miles de colombianos dispuestos a dar la vida por su país, contándome lo pequeño que se sentía frente a la majestuosidad de la naturaleza y la inmensidad del mundo. Pienso ahora estas historias, ya que es justo como me siento en este momento: pequeña e insignificante frente al poder de la naturaleza.

Cuando escuché la noticia de un virus que estaba atacando a la población de Wuhan en China a finales de diciembre del 2019, siendo honesta, me preocupé. Claro, pero como nos preocupa todo lo que vemos a través de una pantalla que parece lejano y ajeno a nuestra realidad. De hecho, pensé “esto no va a llegar a Colombia”. No obstante, esto golpeó en la cara a más de uno,  llegó a nosotros de manera rápida e inesperada.

Desde que se confirmó el primer caso de COVID-19 en Colombia, el pasado 6 de marzo del 2020, el panorama en mi mente cambió. Eso que vi tan lejano estaba frente a mí, junto el temor y las preguntas: ¿una pandemia?, ¿el país está preparado para esto?, ¿mi familia?, ¿las personas en la calle?, ¿colapsará nuestro sistema de salud?, ¿qué pasará con los vendedores ambulantes?

Tantas inquietudes aún me trasnochan, a pesar de las medidas tomadas por el gobierno nacional, entre ellas la cuarentena. En estos días he querido engañarme y pensar que todo está bajo control, pero en el fondo considero que todos sentimos el sinsabor de tantas dudas sin resolver y el miedo de ver el número de muertos aumentar, las tristes noticias, la situación de las personas en la calle y la incertidumbre del mañana.

Para algunos, el mayor problema es el encierro. Para otros, pensar qué comerán y cómo subsistirán con sus familias. Creo que entre esos nos encontramos la gran mayoría de colombianos: pasando los días sin saber qué pasará mañana, sufriendo las consecuencias económicas y pensando en cómo pasar los días estirando los ahorros, pagando obligaciones  y facturas que no dejan de llegar, cubriendo las necesidades básicas y  manteniendo a salvo a nuestras familias.

En estos momentos, cuando nos encontramos encerrados con nosotros y nuestros demonios, nos demuestran lo pequeños e insignificantes que somos ante la naturaleza. Por más que nos creamos una especie superior, somos tan pequeños. No obstante, hay situaciones que nos hacen despertar y eso hoy lo está notando la humanidad entera. Son muchas personas las que luchan a diario contra enfermedades y situaciones que nos dejan a nosotros en la nada y nos enseñan que lo verdaderamente valioso es la vida, la salud y el amor de nuestros seres queridos, que no vale de nada pasar nuestra vida tratando de demostrar lo superiores que somos, acumulando títulos, dinero, cosas materiales y actuando sin pensar en el otro, con tal de conseguir nuestro beneficio propio.

Este tiempo me ha demostrado que lo verdaderamente importante se encuentra en nuestros actos. Considero esta pandemia como una segunda oportunidad que nos ofrece la naturaleza de aceptar lo pequeños que somos y de darnos cuenta que debemos cuidar nuestro planeta. Debemos notar que nuestras acciones irresponsables tienen consecuencias irreparables, también debemos dejar de vivir como si estuviésemos solos en el mundo: tenemos la responsabilidad como especie de reparar el daño que hemos causado.

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Nota Ciudadana
En el Caribe comes o pagas energía

En el Caribe comes o pagas energía

Nota Ciudadana
Rosario Tijeras, 25 años: la 'femme fatal' de nuestra literatura y cine nacional

Rosario Tijeras, 25 años: la 'femme fatal' de nuestra literatura y cine nacional

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--