El liderazgo de Claudia López ha quedado más que claro durante esta cuarentena. Tiene una facilidad de palabra que todo líder debe tener, es directa, le sabe hablar al pueblo, vive en un edificio estrato 3 y está en continuo contacto con la gente. El otro, técnico, preciso como un teleplonter, va como en piloto automático. Nadie duda que Duque está poniendo todo lo que tiene para estar a la altura de la crisis, el problema es que no tiene más. Por eso, por puro desgaste metal, comete errores infantiles, como por ejemplo pedirle a William Vinasco CH que cante goles contra el Coronavirus, vergonzoso.
Claudia no tiene libreto y sabe hacer las cosas. Para nosotros quedó claro que desde un principio fue la primera opositora de los grupos económicos que nos querían mandar a la calle a convivir con el virus. Su presión, su cantaleta fue fundamental para que la cuarentena se extendiera. Si, hay algunas partes de Bogotá con hambre pero ella estará a la altura para solventarlo.
Al menos eso esperamos, al menos eso transmite. En Bogotá nos importa más lo que diga y piense que lo que puede hacer el presidente. En Bogotá Duque no manda, eso lo hace Claudia. Él lo sabe, está demasiado cansado para revirar. En el último video Claudia, en vez de hablar con un lenguaje técnico de Duque, nos enseña con consejos prácticos a hacer tapabocas. Antes quiso hacer más, como quitarnos de encima los servicios públicos, pero como ella misma lo dijo es que Duque ni raja ni presta el hacha. Vamos presidente Claudia, nosotros estamos para servirle