Desde que entregó su responsabilidad como Provincial de los Jesuitas hace dos meses, el Padre Francisco De Roux está dedicado de tiempo completo al proceso de paz. Le habla al oído al Presidente Santos con quien se reúne privadamente con frecuencia. Pero también dialoga con la guerrilla en La Habana y muy especialmente con las víctimas de los distintos actores armados. Ha sido testigo excepcional y con manejo confidencial de todos los encuentros de las víctimas con los comandantes guerrilleros. Desde sus tiempos en el Magdalena Medio, el padre Pacho De Roux ha sido un impulsor de procesos de reconciliación y ha propiciado encuentros entre miembros de los distintos grupos armados enfrentados. El padre Carlos Correa desde octubre es la cabeza de los jesuitas en Colombia.
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