“Desnúdese por favor”: el ritual del examen médico
Opinión

“Desnúdese por favor”: el ritual del examen médico

Cánceres de seno, hemorragias internas, infecciones, hasta fracturas óseas, son algunos ejemplos de graves enfermedades cuyo diagnóstico temprano se puede pasar por alto por no examinar directamente

Por:
febrero 24, 2018
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.

Sin duda alguna, el ejercicio de la medicina ha cambiado. La tecnología parece haber alejado las bases del diagnóstico, desplazándolas hacia ella. Me explico. Tanto médicos como pacientes, en ocasiones, –no pocas- prefieren un examen físico superficial, y muchos exámenes de laboratorio y radiología. La prisa, la comercialización de la medicina, la fe ciega en la tecnología, y hasta la vergüenza del cuerpo, parecen estar por encima de la sabiduría humana.

Observación, palpación, percusión, auscultación, los cuatro pilares del examen médico. Métodos que han evolucionado a través de los siglos, avance de la medicina humanista.

La visión del médico que explora el cuerpo desnudo, comenzando por la piel encuentra no solo sus males, sino también evidencia de enfermedades al interior del cuerpo. Se adentra luego, bajo ella, en busca de prominencias, deformidades, coloraciones y otros signos visibles, que den coherencia al diagnóstico buscado. Reafirma con ello el compromiso entre médico y paciente. Mostrándose este último en su fuero interno (desnudez de cuerpo y alma), no oculta sus miserias, en miras de encontrar la paz. Quintaescencia del acto médico.

El contacto directo de la mano sobre la piel transmite un mensaje que consuela, anima y protege. También detecta cambios en textura, temperatura,  sensibilidad, imposibles de examinar por encima de la ropa. Es uno de los más difíciles para el paciente, dada la connotación social que tiene, sobre todo en ciertas áreas del cuerpo, donde el respeto del médico debe ser profundo. Es el método que más acerca, con la posibilidad de generar confianza.

La percusión, posiblemente el menos comprendido por la persona (¿por qué me da golpecitos este médico?) conduce hasta el oído experimentado el sonido que demuestra cavidades o consolidaciones donde no debería haberlas. Es una “radiografía” en el lecho del enfermo, que nos puede ir confirmando la sospecha de una neumonía, por ejemplo. Bello método ideado por un insigne médico austríaco, el doctor Leopoldo Auenbrugger. No hablo de su necesidad imperiosa en un caserío aislado, hablo de su necesidad fundamental en el más desarrollado centro médico en la gran ciudad.

 

 

¿Sabía usted que en cuello y cabeza, podemos auscultar “soplos”,

indicios ciertos de enfermedad vascular?

 

En más de una ocasión hemos debido “pegar” nuestra oreja a la piel del paciente, para escuchar los sonidos de pulmón o abdomen. ¿Sabía usted que en cuello y cabeza, podemos auscultar “soplos”, indicios ciertos de enfermedad vascular? No se le haga raro si su médico pone el estetoscopio en ojos o por encima de ellos, mas bien de las gracias del buen entrenamiento que el recibió –y aplica-. ¿Será que cuando auscultamos corazón no estamos auscultando también dichas y desdichas? Ciertamente, sí.

Incluso el olfato, (por extraño que parezca) detecta, en aliento o piel, trastornos metabólicos, endocrinos, que requieren, en ocasiones, un tratamiento urgente.

Es una realidad cómo se pasan por alto diagnósticos tempranos de enfermedades graves, por el simple hecho de no examinar directamente. Reportados y vistos: cánceres de seno, hemorragias internas, infecciones, hasta fracturas óseas, son apenas unos ejemplos de la gravedad de no desnudar al paciente; de confiar solo en las ayudas diagnósticas; de la prisa; y del creer que un síntoma conlleva un paraclínico y que eso sea suficiente.

Es frecuente que pacientes, conscientes, se sientan complacidos por un examen a profundidad y lo manifiesten a su médico con un: “Doctor, es usted el primer médico que me examina, ¡Gracias!” Ah, sublime recompensa para el galeno.

La vida está llena de rituales, desde lavarse las manos hasta hacer el amor. Este ritual, el del examen médico, conecta a los dos seres de una forma humana, indescriptible en su belleza y profundidad de alma y sentimientos. No nos lo perdamos.

[email protected]

www.lamisiondelalma.com

 

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Manejo médico en el hogar del covid-19

Manejo médico en el hogar del covid-19

Medicina, un nuevo panorama

Medicina, un nuevo panorama

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--