En 1968, el año en el que Colombia recibió la primera visita del máximo jerarca de la Iglesia Católica, Medellín fue sede de la segunda Conferencia General del Consejo Episcopal Latinoamericano, CELAM, organización que agrupa y representa a los episcopados del continente.
Hoy, 50 años después, la CELAM se vuelve a reunir en la ciudad de la eterna primavera para medir y reflexionar los resultados derivados de la histórica conferencia desde un enfoque social, cultural, político, económico y eclesial.
A raíz de esto nace “Medellín 50 años”, un congreso eclesial que cuenta con la participación de aproximadamente 500 religiosos de 20 países latinoamericanos, del caribe y algunos representantes de Estados Unidos y Canadá. El evento fue instalado y promovido por el alcalde paisa, Federico Gutiérrez, quien abordó la evolución lograda por la ciudad desde 1968 hasta la actualidad.
“Hace 50 años, cuando los representantes de la CELAM vinieron, esta era una ciudad muy diferente. Hoy encuentran una ciudad renovada, que ya vivió las peores épocas del narcotráfico y la violencia, y que se ha venido transformando no solo en lo físico sino también en lo social, ahí es donde hay que hacer un énfasis grande en el trabajo de la iglesia”, manifestó Federico Gutiérrez Zuluaga.
Este nuevo congreso, que se desarrolla desde el jueves 23 hasta el domingo 26 de agosto en las instalaciones del Seminario Conciliar de Medellín, ha sido una nueva oportunidad para generar lecciones y reflexiones por los avances logrados desde todos los ámbitos en los últimos 50 años. Pero, además, en este espacio se establecerán nuevos objetivos con los que el consejo Episcopal Latinoamericano podrá proyectar un mañana todavía mas prometedor para la capital antioqueña y la sociedad colombiana.
Durante el desarrollo de los eventos programados, varias personalidades importantes y reconocidas del clero reiteraron la importancia de mantener el trabajo conjunto entre las organizaciones religiosas de la región por medio de este tipo de eventos. Además, han reconocido el gran significado de volver a reunirse en Medellín 50 años después para apreciar la positiva renovación que ha tenido la ciudad.
“Este congreso tiene un profundo significado, porque conmemora 50 años de la Segunda Conferencia del Episcopado Latinoamericano, cuando en 1968 quiso aplicar el Concilio Vaticano Segundo a América Latina. Y por tanto, hizo un análisis de la realidad a partir del cual propuso una serie de elementos para la construcción social, para trabajar en función de la justicia, para ser una opción de los pobres y para construir una iglesia que respondiera al cambio del momento. Hoy en este congreso repasamos lo que hemos vivido durante este tiempo y analizamos cómo podemos seguir adelante”, explicó monseñor Ricardo Tobón Restrepo, arzobispo de Medellín.
El Congreso Medellín 50 años es impulsado por la CELAM, la Confederación de Religiosos y religiosas, en conjunto con el Secretariado Latinoamericano y del Caribe de Cáritas, SECLAC, y la Arquidiócesis de Medellín.
