Hace exactamente un año, 21 de marzo de 2018, se publicó un artículo titulado El peligro de una constituyente uribista. Acá un resumen:
- La insistencia de algunos con una asamblea nacional podría tener que ver con su deseo de derogar el artículo 197 y que Uribe vuelva al poder en 2022.
- Una constituyente es necesaria para reformar la justicia (las altas cortes no se han dejado reformar) y el Congreso no existe voluntad para reestructurar el sistema político.
- Desde las toldas del Centro Democrático quien más ha clamado por una constituyente ha sido Uribe. ¿Por qué tanta insistencia? Se podría pensar que el uribismo buscaría tumbar las cinco reformas que introdujeron diferentes componentes del acuerdo de paz a la Constitución, Duque podría convocar a una constituyente para tumbar la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), las 10 curules de la Farc, la cláusula de cumplimiento y las inversiones para el posconflicto.
Luego, a finales del año pasado, el 11 de noviembre de 2018, se pronunció el presidente del Senado: "Definitivamente no es posible tramitar vía Congreso, verdaderas reformas a la justicia, ni política, ni ajustar los acuerdos de La Habana; las presiones de las Cortes y otros intereses lo impiden. El presidente no debe descartar la convocatoria de una asamblea constituyente".
Aunque muchos criticaron al presidente del Senado por dicha declaración, afirmando que él desconocía que es el mismo Senado el que debe convocar una constituyente, hoy se puede decir que Macías no se equivocó, solo se lo planteó a la opinión pública con mucho tiempo de anticipación.
¿Qué puede venir ahora?
- Duque objetó la JEP y se tramitarán en el Senado las objeciones.
- El Senado rechazará todas las objeciones en una coalición amplia que incluirá incluso a Cambio Radical, Partido de la U y Partido Liberal (como ya sus líderes lo han anunciado). Incluso, la Corte Suprema de Justicia se interpondrá para no permitir que las objeciones se pasen al congreso.
- Ernesto Macías, presidente del Congreso, convocará una asamblea nacional constituyente alegando que en el Senado no existe voluntad para reformar la justicia.
- Se eliminarán los seis altos tribunales de la Corte Suprema de Justicia y se creará una Super Corte (lo dijo públicamente Uribe en campaña de Duque).
- Se eliminará la JEP o se reformará para evitar entrada de la CPI, solo que se creará a medida para beneficiar al Estado y para condenar a las Farc.
- Y finalmente lo más esperado, se derogará el artículo 197, lo cual permitirá que Álvaro Uribe Vélez sea candidato a presidencia en las elecciones de 2022.
- Quizás se adelanten elecciones presidenciales para 2020 o 2021 para completar todo el plan de forma rápida y efectiva.
