En el Valle del cauca ha empezado, desde hace ya varios meses, el movimiento político con miras a las elecciones presidenciales y legislativas del 2018. La U, Liberales, Conservadores y Cambio Radical padecen la crisis partidista generada por los constantes escándalos de corrupción que se han conocido a través de los medios. Así se está alineando la clase política en el departamento.
La jugadora política más importante del momento es Dilián Francisca Toro, la “ñoño” valluna (Por la cantidad de votos). 513.441 votos le dan esa posición, sumado a cuatro concejales de Cali, cuatro diputados, un senador, dos representantes, la directora de Coldeportes, la alcaldía de Buenaventura, de Palmira, de Tuluá, entre otros municipios. Con este poder, es muy apetecida por los candidatos presidenciales y ya se vislumbra una posible alianza: Germán Vargas Lleras.
Esta alianza parece casi inevitable por varias razones: La U no tendrá candidato propio; los liberales no tienen un líder visible y Humberto de la Calle se fue por firmas; los conservadores tienen en el Valle a Ubeimar Delgado, que no mueve ni polvo; y por los alternativos: Petro, Robledo, Fajardo, Clauda López o Clara López, casi que imposible concebir dicha alianza. No hay de otra, Germán Vargas Lleras es la única opción viable que le resta a Dilián Francisca Toro para seguir teniendo el guiño favorable de un futuro gobierno liderado por él (suponiendo que gane). La alianza se dará.
Vargas tiene todo el apoyo de Cambio Radical en Cali: el representante José Luis Pérez salió hace poco a recoger firmas con él en compañía de sus concejales y su diputada, como se aprecia en la fotografía (fuente: twitter de Mariluz Zuluaga, diputada de Cambio Radical). Pérez es otro de los jugadores políticos importantes en el departamento, cuenta con una organización fuerte, con amplia participación burocrática en la alcaldía y aspira a dar el salto al Senado de la República. Las otras dos figuras de Cambio Radical importantes en el Valle son el senador Carlos Fernando Motoa y el representante Carlos Abraham Jiménez, quienes apoyarán a Vargas Lleras.
Los conservadores, por otro lado, están inmersos en diversas peleas internas que le ha costado unidad y cohesión partidista, se han alimentado los celos y ha habido acusaciones de doble militancia. Los dos jugadores más importantes del partido son Ubeimar Delgado, quien es precandidato presidencial, pero que no marca en las encuestas, ni lo nombran en muchas de ellas. Sin embargo, tiene peso electoral y cuenta con estructura organizada. Ubeimar ha sido muy crítico a la actual dirección que tiene el partido a nivel nacional y es cercano al expresidente Andrés Pastrana. La otra cara de la moneda la conforma Heriberto Sanabria, representante que quiere dar el salto al senado, pero que apoya a tres candidatos a Cámara al mismo tiempo. Ambos han acusado a diferentes políticos conservadores de apoyar candidatos de otros departamentos, hecho que podría golpear la lista conservadora. Incluso, algún sector podría irse con Vargas Lleras por debajo de la mesa.
Si en los azules no escampa, los liberales padecen una tormenta peor. Son el partido más dividido y fragmentado del departamento. Dos de sus grandes líderes regionales hicieron alianzas con políticos de otras regiones, desde las elecciones de 2015 viene una disputa interna en Cali y los posibles candidatos presidenciales no marcan tampoco (Luis Fernando Cristo, Luis Fernando Velasco, Juan Manuel Galán y el Vallecaucano Edison Delgado, que está en la misma situación de Ubeimar Delgado, no pasa nada). Humberto de la Calle por firmas se puede llevar los votos de algunos líderes liberales como José Uriel Rojas, quien aspira a la Cámara de Representantes por los rojos. Lo que sí es claro y paradójico, es que los liberales, en medio de su competencia y disputa, obtendrán grandes resultados en la cámara debido a que la integran líderes con grandes votaciones en la región.
En cuanto a los alternativos, el Valle del Cauca ha sido un departamento estéril para la izquierda democrática, en Cali de 21 concejales, solo una pertenece al Polo y otro al Verde (y entre ambos se critican duramente); en el Valle, los amarillos cuentan con un diputado y los verdes con una diputada (ninguno de los dos hace oposición) que no sabe a qué lado juega, porque su jefe político se cambió a los liberales y esos votos migrarán para allá. La figura más notoria es la Jorge Iván Ospina que apoyará la coalición Robledo, Claudia y Fajardo y que, todo indica, no aspirará al senado para ser candidato a la alcaldía de Cali.
PD. Por último, la situación que se presenta a nivel nacional con los conservadores, acusados de estar enmermelados para apoyar a Juan Manuel Santos se presenta en el departamento: Ubeimar Delgado ha acusado a varios diputados de estar enmermelados y de apoyar a candidatos de otros partidos por debajo de la mesa, tal como lo han señalado algunos medios. http://lasillavacia.com/historia/lo-que-pierde-ubeimar-lo-gana-andrade-61733
Solo resta pues esperar si las alianzas se mantienen o mutan, apenas estamos empezando la campaña.
