Poco se sabe de las personas que encontraron entre bolsas de basura y costales en varios puntos de Bogotá. Algunos de ellos siguen como no identificados en las bóvedas del Instituto de Medicina Legal.
Pero los investigadores, debido a las mismas maneras de la muerte de las víctimas, amarrados de pies y manos y quemados y torturados, lograron determinar que la mayoría fueron asesinados en casas de tortura y muerte ubicadas en el centro de Bogotá.
Estas casas, que compararon con las ‘casas de pique’ de Buenaventura, fueron ubicadas en el viejo barrio San Bernardo, frente al parque Tercer Milenio, que está siendo demolido por el Distrito.
Según los investigadores, los muertos que tienen atemorizados a los bogotanos fueron asesinados en estas misteriosas y viejas casonas. Para los equipos de criminalística las razones de estos macabros homicidios son enfrentamientos entres bandas de microtráfico que buscan apoderarse a como de lugar del negocio de venta de drogas.
Las investigaciones han logrado apuntar hacia varios miembros de las bandas dedicadas al trafico de estupefacientes e el centro y otra zonas de Bogotá y hacia otros grupos sicariales como los responsables de estos homicidios selectivos que tienen como base de sus crímenes, la tortura y la sevicia.
