La planta ubicada en Rozo seria cerrada si no se retiran a los 50 felinos que llegaron a las instalaciones a vivir. El gerente de la Industria de Licores del Valle, Luís Fernando Martínez, dispuso un plan de acción con jornadas de sensibilización para evitar que los empleados suministren alimentos a los felinos que están instalados en la sede de la empresa. Activó igualmente un plan de recuperación de los gatos, se les prestó atención veterinaria y ya 18 han sido llevados a albergues de protección animal. Si no se reubican a todos los animales de la planta, el INVIMA puede ordenar el cierre de la sede. Los funcionarios del INVIMA que realizaban operativos de control advirtieron la presencia de los animales en la planta ubicada en Rozo, y que amenazan la higiene de los ambientes de producción. La situación generó una alarma grande teniendo en cuenta que es una de las principales compañías generadoras de empleo en el Departamento.
