Los suelos del Cesar y La Guajira guardan la mayor cantidad de carbón de Colombia y su explotación hace del país el quinto exportador mundial, principalmente a mercados europeos y asiáticos. Y allí, en esos dos departamentos tienen concentrada su actividad minera las tres multinacionales líderes: Drummond Ltda, Carbones del Cerrejón y el Grupo Prodeco.
La primera gran mina de cielo abierto que empezó en el país fue precisamente la del Cerrejón, en la Guajira a finales de 1976. El gobierno de Alfonso López Michelsen decidió vincularse al proyecto mediante la creación de la empresa estatal Carbocol, que pasó a explotarlo en proporciones iguales con Intercor, filial de la Exxon Corporation (hoy Exxon Mobil). El Presidente Andrés Pastrana en noviembre del 2000 vendió la participación de Carbocol al Consorcio integrado por las compañías subsidiarias de BHP Billiton, Anglo American y Glencore International.
Dos años después, el Consorcio le compraría el restante 50 % a Intercor, convirtiéndose en el único dueño del proyecto carbonífero Cerrejón Zona Norte, bajo el nombre de Carbones del Cerrejón Limited, Cerrejón. La empresa incluye además de la mina, una línea de ferrocarril y un puerto marítimo, Puerto Bolivar en Bahía Portete, en La Alta Guajira.
La Presidente de la compañía en Colombia es Claudia Bejarano quien está al frente de la negociación con el sindicato de trabajadores de Cerrejón que se encuentran en huelga desde hace quince días.
Desde el pasado 31 de agosto la mina de El Cerrejón en La Guajira esta en huelga, situación laboral que se ha repetido en varias ocasiones
El consorcio que explota la mina del Cerrejón está integrado por tres poderosas compañías mineras.
Ernest Oppenheimer fundó en Sudáfrica en 1917 la Anglo American con fondos británicos y americanos, de ahí su nombre. De la explotación de oro pasó a los diamantes convirtiéndose en el mayor accionista de la sudafricana De Beers, empresa que controló ese mercado el siglo pasado. Explotan varios otros minerales como el cobre, platino y mineral de hierro. Los Oppenheimers, quienes estuvieron tres generaciones al mando, conservan el 2.2% de la empresa, la cual se encuentra hoy en manos de varios fondos de inversión y opera desde Londres.
El grupo anglo-australiano BHP Billiton resultó de la fusión en 2001, de la australiana BHP y la compañía británica-holandesa Billiton, una antigua empresa que nació en 1851, con la explotación de una mina de estaño ubicada en un pequeña isla de Indonesia, isla Billinton (Belitung).
BHP nació de la explotación de plata en Broken Hill (Broken Hill Proprietary Company ahora BHP) en 1885 y pasaron luego a la explotación de plata, plomo y zinc. Aunque poseen dos órganos de accionistas separados, la australiana BHP Billiton Limited y la británica BHP Billiton tienen una estructura de gestión única, cuya sede mundial se encuentra en Melbourne, Australia.
Glencore, la otra socia, es una compañía mucho más joven. La fundó en 1974, Marc Rich + Co Ag (nacido Marcell David Reich), un comerciante internacional de materias primas, acusado en Estados Unidos de evasión fiscal y acuerdos ilegales con Irán. Estaba en Suiza al momento de la acusación y nunca regresó a los Estados Unidos, aunque recibió un indulto presidencial muy cuestionado por parte de Bill Clinton el último día de su cargo, el 20 de enero de 2001.
Rich perdió el control de Glencore International en 1993 y la compañía fue renombrada Glencore. Xstrara, empresa que en algún momento figuró socia de Cerrejón, se fusionó con Glencore en 2013, una de las fusiones de empresas mineras mas grandes de la historia. Ivan Glasenberg, además de ser el mayor accionista individual, con un 9.1%, es el CEO desde 2002.
Glencore no solo forma parte del consorcio dueño de Cerrejón, sino que es a su vez dueño en su totalidad del Grupo Prodeco, que entró al país en 1995 con la adquisición de Cerrejón Central, la mina Calenturas y Puerto Zuñiga.
No paró ahí, adquirió la totalidad de mina La Jagua en dos etapas, y la mina Consorcio Minero Unido. Para poder exportar el carbón térmico y metalúrgico que produce, se hizo a una participación del 39,76 % de la Concesión Ferrocarriles del norte - Fenoco, y construyó el puerto de exportación de carbón, Puerto Nuevo en el Magdalena.
Una decisión judicial los obligó a construir un puerto conectado por via férrea con las minas para evitar la contaminación del Caribe con sus barcazas
La Drummond, es la otra gran empresa minera presente en el país. Fundada en 1935 por Heman Drummond, familia original de Birminghan, Alabama, quienes se hicieron ricos con la explotación y producción de carbón y sus derivados, hoy son líderes mundiales. Garry Neil, uno de los hijos manejó la empresa durante cincuenta años, después de su muerte, su hijo Mike Drummond pasó a ser presidente de su Junta Directiva donde participan varios miembros de la familia. El CEO actual es Richard Mullen.
Llegaron al país con una primera concesión en 1987 con el proyecto carbonífero conocido como La Loma en el área entre los municipios de El Paso, La Jagua de Ibirico y Chiriguana. Le siguió en 2009 la entrada en producción de la mina El Descanso en el Cesar. Dos años después, en 2011 le vendió el 20 % de la operación en el país a la japonesa Itochu Corporation. Construyeron vías férreas para conectar las minas con Ciénaga en el Magdalena donde construyeron Puerto Drummond, de aguas profundas en el Mar Caribe para poder exportar el carbón directamente.
A estos tres grupos empresariales, le pertenecen siete de las nueve empresas extractoras de carbón que figuran entre las mil empresas más grandes del país, pero donde solo Drummond generó utilidades en 2019
Fuente: Informe Supersociedades a Diciembre 2019 en miles de pesos
Las condiciones del negocio del carbón en el mundo han cambiado radicalmente, por la drástica disminución del consumo de carbón térmico, aunque los estudios mundiales indican que el uso de carbón no se acabará, mientras sea barato.
Las empresas internacionales que se mantienen en el negocio probablemente se concentrarán en aquellas minas con los costos más bajos y la mejor calidad del carbón. El carbón colombiano cumple ambas condiciones, de bajos costos de producción en operaciones de minería a cielo abierto y de alta calidad por su alto contenido de energía, por lo tanto aquí se quedarán.
