El anuncio del regreso a clase de 120 instituciones públicas esta semana es un logro en el que se combinaron la táctica de diálogos, vacunas y las estrictas directivas de la Ministra Maria Victoria Angulo que obligaron a los maestros, aún en contra de su voluntad.
Su mano derecha es la viceministra Constanza Alarcón - exdirectora Fundación Alpina- quien le hace frente a las regiones asegurándose de que las instituciones implementen las medidas de bioseguridad en las aulas para un retorno responsable. Clara Inés Páez, la directora de Calidad del viceministerio, es quien se ocupa de lidiar con las secretarías de educación de las ciudades principales y municipios en su intento por contar con un mayor apoyo que haga jeque a la voz de la oposición.
Esta triada de mujeres templadas han tenido un eco clave para adelantar el plan de regreso a clase, en la Secretaria de educación del Distrito Edna Bonilla quien junto a la alcaldesa Claudia Lopez han sido unas abanderadas de enseñanza presencial y aseguraron de manera rápida la vacunación de los maestros de los colegios públicos de Bogotá. Los padres de familia han sido aliados claves en el propósito que a pesar del pataleo del férreo sindicato de la ADE que se ha opuesto, argumentado que la infraestructura escolar no es la adecuada. Lo cierto es que el 8 de julio se cumplió el regreso a clase!
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