Cada vez que llegaba a meta con su camiseta rosa Egan, como si fuera una cábala, se bajaba de su cicla y besaba a Maria Fernanda Motas. Desde el año pasado, cuando salieron sus fotos con ella, relajado, feliz, se daba cuenta que la energía había cambiado. Si bien su antigua novia, Xiomara Guerrero, se ganó el corazón del país cuando la conocimos, la médica veterinaria Maria Fernanda Motas. Estas fotos invitaron al optimismo:
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Motas le ha hecho el quite a los medios de comunicación y ha mantenido el bajo perfil. Sin embargo no pasó desaparecibido el momento en el que llegó al Giro a acompañar a su novio:
Egan ganó a los 24 años su segunda gran vuelta. En el Tour de Francia del 2020 sus problemas de espalda le acabaron todas sus ilusiones. Hubo mucha desconfianza sobre su título en incluso campeones como Bradley Wiggins lo criticaron y dijeron que se había ganado el Tour del 2019 practicamente por suerte, porque cancelaron una etapa. Acá calla todas las bocas y la de Mafe Motas la calló con el más dulce de los besos.
