La asignación de un presupuesto para el deporte no es suficiente

La asignación de un presupuesto para el deporte no es suficiente

El sector deportivo ha sido de los más olvidados y en ese proceso hay diferentes retos que se deben enfrentar en términos de salud, cobertura, competencia y otros

Por: Carlos Eduardo Vargas Olarte
julio 21, 2022
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La asignación de un presupuesto para el deporte no es suficiente
Fotos: Archivo Las2Orillas/Twitter @yuberjenherney1

El Deporte hace mucho rato dejó de ser la “quinta rueda del carro” que bajo una perspectiva reducida sólo entretenía y divertía -pasiva o activamente-, o sólo se practicaba por algunos jóvenes talentosos en el colegio, universidad en el tiempo libre o en los eventos que elegían personas mayores para atraer audiencias, captar patrocinadores y comprometer fondos / partidas del erario público.

Desde finales del Siglo XX y en la primera mitad del Siglo XXI, el Deporte, es indiscutible la importancia que ha alcanzado este hecho social referido al uso social del cuerpo (la corporalidad: no sólo como ente biológico, sino de orden integral) como medio y vehículo de comunicación que legitima su existencia social en su relación con los otros, la sociedad y la naturaleza.

La Cultura Corporal Moderna (la Cultura Somática) coloca de presente los valores y normas relacionados con la percepción, el empleo o uso del cuerpo en su totalidad como unidad indivisible -no la anacrónica concepción dualista de cuerpo y alma- en interacción con la cultura de movimiento, la cultura lúdica (corporalidad, movimiento lúdico, juego) y la cultura del entretenimiento con el entorno  contribuyendo a configurar un conjunto de prácticas sociales/ comportamientos que se agrupan bajo los Modelos de Deporte.

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Los Modelos de Deporte son producto del cambio social (Parsons,T. 1950), el cambio de valores (Inglehart, R. 1977), la diferenciación de la sociedad, los nuevos ideales de corporalidad y la liberación de la subjetividad (Rittner, V. 1975, 1976, 1982), (Heinemann, K. 1983), Luhmann, N.1984), (Vargas, Ce., Rittner, V. 2017)

El modelo competitivo y de alto rendimiento deportivo, desde su origen, y durante 300 años mantuvo una relación exclusiva con base en la importancia de la acción motriz, la actitud, la aptitud y la comunicación corporal con carácter agónico y antagonista en función de lo productivo industrial soportado por los principios de la competencia económica transferida a la competencia deportiva, las nuevas técnicas corporales, las regulaciones de comportamiento, así como las relaciones de autoridad y poder.

Después de tres siglos y luego de tres revoluciones industriales, cuyos conocimientos, principios y métodos han permitido a nivel orgánico, incrementar la fuerza, mejorar la velocidad, la coordinación y alejar cada vez mas los puntos de cansancio, el Deporte 4.0 ha entrado en interacción con los instrumentos propios de la era digital, los cuales no solo prolongan el alance de nuestras mentes (Gates, B. 2000), sino que proyectan su influencia en la realidad social impactando el cambio social, de valores, la diferenciación de la sociedad, el estilo de vida en el trabajo, en el tiempo libre, los ideales de corporalidad y personalidad, la liberación de la subjetividad y la importancia del individualismo, así́ como del trabajo en Red.

Todos estos aspectos influyen en la concepción de la corporalidad, las técnicas corporales, el movimiento lúdico, la diferenciación de los motivos, intereses, necesidades, expectativas, frente a la práctica deportiva (actividades, disciplinas y formas) , así como de los tipos de organización, los niveles de rendimiento deportivo y de otros principios en función de la atención y la satisfacción tanto en el plano individual como social concediéndole valor e importancia a los diferentes Modelos de Deporte:

  1. a la salud integral (Deporte- Salud), 2. al equilibrio frente al estilo de vida, a la diversión y al disfrute de la corporalidad y el movimiento lúdico: Deporte Amplio (Para Todos y de Tiempo Libre), 3. a la exploración de nuevas posibilidades y experiencias movimiento (Deporte de Nuevas Tendencias/ Nuevas Tendencias Deportivas -NTD) e incluso, 4. a las nuevas formas de relación e interacción entre humanos mediada por la máquina con base en los desarrollos tecnológicos de la conectividad y la interactividad (Deporte Electrónico/ e-Sport)

El proceso de diferenciación de estos modelos, facilitó la comprensión de la diferenciación del rendimiento deportivo, que pasó a ser entendido en diferentes acepciones: 1. el mejorar un desempeño individual sin necesidad de vencer a otro, 2. superar la forma de ejecución y / o el resultado de una acción (comportamiento, gesto o movimiento) 3. superar un obstáculo, una limitación, o atreverse a realizar un movimiento bajo determinados parámetros, o criterios particulares de satisfacción y disfrute de lo realizado, sea un buen ejercicio, un salto, un pase, un buen saque, un revés, una canasta, la colocación de una bola. Aprender, intentarlo, repetir también es rendir 4. Disfrutar la sensación plena de bienestar, alegría, satisfacción de realizar una acción.

En el Siglo XXI el Deporte no se puede reducir a ser un objeto de estudio y una actividad instrumental de orden físico-biológico, como tampoco limitada al campo escolar, la diversión y el entretenimiento (competitivo y recreativo). El Deporte, bajo una perspectiva científica y sociopolítica, es : 

  1. un medio satisfactor ante diferentes necesidades del humano, mediante una actividad de carácter integral (desempeño de todas sus dimensiones).
  2. un sistema social de amplio espectro y complejidad, con posibilidades para neutralizar los impactos negativos de fenómenos como la globalización, las crisis socio económicas, sociopolíticas y ambientales que ella origina e inciden en la agudización de los procesos de exclusión, marginamiento y discriminación (incrementando las desigualdades sociales), así como de las manifestaciones de desarraigo, desintegración y comportamientos agresivos que revelan una poca responsabilidad personal, social, ambiental y cívica.
  3. Un proceso social que contribuye al desarrollo del capital social, a impulsar el desarrollo socioeconómico, sociopolítico y sostenible, la búsqueda, -conservación y mantenimiento- de la Paz promoviendo valores como la fraternidad, la solidaridad, la no violencia, la tolerancia y la justicia.
  1. Reto de Gestión: Quienes dirigen el Deporte –en la actualidad y a futuro– se enfrentan a un reto: mantenerse aferrados a las perspectivas (tendencias) tradicionales- anacrónicas-, o asumir el desafío que a nivel de conocimiento, le imponen las nuevas tendencias y las contra tendencias, demandando conservar lo bueno –del Modelo de Deporte de competencia y alto rendimiento deportivo–, ejecutar mejoramientos, implementar las transformaciones y los cambios necesarios motivados por: la nueva realidad/ normalidad a causa del Covid 19, las demandas de los deportistas de nivel olímpico, las nuevas condiciones de los diferentes grupos poblacionales en el orden social, cultural, científico, económico, político, ambiental y tecnológico, así como en el impacto en los valores de individuos y la sociedad.

Reconocer los principales cambios relacionados con:

  • Diferentes Modelos de Deporte :
  1. Deporte -Salud
  2. Deporte Amplio (Para Todos y de Tiempo Libre)
  3. Competencia y Alto Rendimiento deportivo.
  4. Nuevas Tendencias Deportivas (NTD).
  5. Deporte Electrónico (e-Sport)
  • Diferentes Niveles de Rendimiento (aprendizaje, juego, ejercicio, entrenamiento, competencia, diversión, exploración).
  • Diferentes Formas de Organización (libre, club, asociación, liga, federación, equipos, individual y eventos deportivos)
  • Diferentes Modalidades de práctica (disciplinas deportivas de calendario olímpico, actividades deportivas- no olímpicas, cultura tradicional de movimiento, nuevas prácticas, actividades libres/ no reglamentadas.
  • La interacción con la Tecnología (computador / IP, realidad virtual, realidad aumentada, Tecnología Móvil 5G)
  • La “caída” de las fronteras entre el Deporte y el Computador
  • Apertura para el cambio del rol pasivo del espectador o del aficionado ofreciendo posibilidades de “inmersión” “intervención” “interacción” virtual en los juegos, actividades de entrenamiento, ejercitación, entretenimiento con los “Deportistas Ídolos” , “Tutores”, “Entrenadores”, “Coach”.
  1. Reto Socioeconómico: Crear una Cuenta Satélite que permita dimensionar el potencial económico de la actividad deportiva bajo un ejercicio de estructuración, sistematización de datos confiables y seguros para establecer: el monto de las inversiones y el presupuesto del Estado para la promoción, la práctica y el desarrollo del Deporte en transcursos comparativos a través del tiempo, 2. la relación cuantificada de las inversiones en construcciones, instalaciones deportivas, para la promoción y realización de programas o actividades deportivas. 3. Los costos de funcionamiento y de mantenimiento de las instalaciones y organizaciones deportivas dependientes del Estado. 4. Los impuestos cancelados o subsidiados. 5. La cantidad de puestos de trabajo generados en forma indirecta o directa en el sector oficial, privado o en el sector mixto con relación a la actividad deportiva en lo administrativo, lo técnico, el control y el desarrollo del Deporte. 6. La cuantificación del consumo de artículos, implementos y productos relacionados con la actividad deportiva.

Además cifras precisas sobre  1. la industria del Deporte en su conjunto, el alcance y la naturaleza del consumo asociado a esta actividad, la producción, la inversión y su valor añadido bruto a la economía del país. (PIB). 2 un panorama del mercado laboral en el Deporte, como se interactúa, se relaciona, se contribuye, se depende de otros sectores socioeconómicos 3. los efectos de las fluctuaciones macroeconómicas en la industria del Deporte con relación con los cambios en la economía global. 4. la influencia de variables sociales en la industria del Deporte, por ejemplo: como el progresivo envejecimiento de la población tendrá un efecto no despreciable sobre el panorama deportivo, como las personas/ adultos mayores operan en diferente medida, se relacionan y demandan otros tipos de servicios y practicas Deportes. Igualmente con los otros grupos de población.

La responsabilidad de un gobierno está llamada a definir una política pública, adecuar y reformar las estructuras del sistema Deporte como sistema social,  así como de las instancias administrativas que tendrán a su cargo la implementación de las estrategias  planes, programas y proyectos para gestionar el  Deporte bajo la concepción amplia y diferenciada propia de la sociedad del conocimiento.

La política del Deporte debe superar los elementos retóricos y acercarse más a la realidad. La retórica a superarse, es la de las buenas intenciones matizadas con elementos poéticos, muy distanciados de la práctica y de la realidad social. Estos aspectos colocan a las organizaciones deportivas en el “ojo del huracán” con base en cuestionamientos críticos de la opinión pública y de las etiquetas que les califican como entes con prácticas egoístas y excluyentes de la participación amplia del sector comunitario pero subsidiadas en gran parte por el erario público.

Para definir una política de Deporte, es imprescindible el considerar las necesidades, los problemas, las expectativas y las demandas de los sectores comunitarios. A nivel organizacional, tanto en el nivel público como el privado, los procesos internos de una organización están movidos por la demanda, más no por la oferta. Los enfoques basados en la oferta que llegaron hasta finales del siglo XX, hoy en día han sido relevados por el enfoque de la demanda. De allí la importancia del conocimiento sistemático y ordenado de estas demandas para adecuar la oferta por parte del Estado.

La importancia de la interacción del sector privado y el sector oficial para regular la oferta deportiva, recreativa y de tiempo libre es una oportunidad para desarrollar un trabajo conjunto y coordinado en favor de los intereses, los motivos, las expectativas y las demandas de los ciudadanos, es decir frente a una demanda real que cuantificada en sus costos, sus alcances y potencialidades por el beneficio común, quizás pueda permitir el concebir formas mixtas de inversión en función del desarrollo del deporte en sus diferentes modelos.

Esta óptica implica un cambio significativo de concepción y de enfoque, el cual por consecuencia presupone desarrollar una gestión del conocimiento, una apropiación de la interpretación y comprensión de la realidad y sus fenómenos en forma ordenada y sistemática. Este cambio no puede desarrollarse por olfato, sino recurriendo como en todo campo de la acción social y de la gestión organizacional, al uso de hechos y datos para caracterizar las necesidades, las expectativas y los problemas hacia los cuales hay que ofrecer respuestas de atención o solución. Un ejemplo de ello es la necesidad de disponer de datos objetivos- estimativos- sobre los costos de la ausencia de las posibilidades de intervención en favor de la salud integral, el bienestar, la educación informal, reducir las pérdidas de productividad, controlar el incremento de los índices de violencia y morbimortalidad.

El  asumir   una  perspectiva y un enfoque amplio del  Deporte  permite ser consistente, consecuente y coherente con los propósitos de justicia social, equidad, participación, representación, inclusión, respeto por los derechos humanos, mantenimiento y mejoramiento de la Paz facilitando la interacción y el trabajo conjunto  con  otras  áreas  de  la  Gestión  Pública.

Igualmente permite evidenciar el compromiso del gobierno con el Deporte, mediante la promulgación de políticas e iniciativas basadas en los Derechos Humanos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), reconociendo las oportunidades y condiciones -entre planeación, creatividad, innovación y utopía- para activar el comportamiento individual y social a través de procesos participativos, incluyentes y transparentes. Este compromiso debe de ser activado a mediante la relación dinámica entre espacio de vida (desarrollo urbano y social) y estilo de vida desarrollando e implementando las estrategias que caracterizan a una localidad activa y deportiva integral, como concepto asociado a la implementación y desarrollo del Deporte Comunitario

Ofrecer posibilidades para participar de una práctica deportiva en forma diversificada, adecuando y adaptando las formas de práctica de las disciplinas deportivas que tradicionalmente se han promovido bajo un carácter estrictamente competitivo-excluyente-, en diferentes “formatos”, ampliando la oferta y la oportunidad de acceso a nuevos grupos de practicantes a los escenarios, espacios e instalaciones - no bajo el principio de la eventualidad, sino bajo los hábitos de la cotidianidad de un estilo de vida sano y activo, invitando de paso a la generación de formas innovadoras y creativas de práctica y porque no de diseño de espacios e implementos deportivos.

Incrementar las posibilidades de vinculación de personal voluntario para las actividades de gestión, organización, dirección técnica y/o control. Estas cuotas de voluntariado fácilmente relacionadas con la participación e iniciativa ciudadana se pueden dimensionar tanto en lo cualitativo como en lo cuantitativo. En este aspecto, si las organizaciones deportivas comunitarias y deportivas en general, optan por medir el impacto del compromiso del voluntariado con relación al tiempo invertido, y valorando la labor realizada – en forma simulada - podría establecerse un monto de la contribución del voluntariado deportivo, encontrando un indicador de relación económica con el Capital Social que se promueve en el Deporte.

La resistencia al cambio es algo inevitable, máxime cuando esta labor se apoya en conocimientos que aunque adaptados y adecuados al medio, son rechazados, ignorados, o desconocidos por quienes prefieren seguir aferrados al enfoque tradicional que ha caracterizado a estos ámbitos como “campos de acción” y de “actividad”, incrementando la distancia entre ciencia y práctica en el plano de la relación entre la labor dirigencial, la función técnica y de la práctica deportiva, recreativa/ de tiempo libre y hasta de la misma Clase de la Educación Física.

La postura pragmatista, “activista” y “efectista”, por su naturaleza ideológica y concepción sociopolítica, toma distancia de los enfoques teóricos, la confrontación critica de las tendencias, el manejo contextual social, histórico, científico, político y económico, así como de la precisión de lo que son los términos, las definiciones, los conceptos, los modelos, así como las evaluaciones cualitativas y las mediciones del impacto, la eficiencia y la eficacia.

Ellos prefieren las mediciones de cumplimiento y volumen: la sumatoria que arroja como resultado la intrascendencia sociopolítica y socioeconómica  del Deporte, la cual le reduce a la  asignación de  un presupuesto orientado a la ejecución  de programas, proyectos o actividades que no obedecen a un concepto integrador e interfuncional de un sistema social en interacción con otros sistemas y las políticas del estado, sino en el mejor de los casos a un conjunto de actividades / eventos de orden aditivo y funcional para el entretenimiento, la diversión de unos grupos mínimos de población pero que reportan un gran beneficio para arquitectos, ingenieros y políticos que saben dimensionar fondos, obras, fotos y votos.

 

 

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