Si en galardones de periodismo tenemos “La noche de los mejores” o “El premio de periodistas para periodistas”, la jornada del 10 de diciembre fue la velada el olvido a través del II Premio de Periodismo “Construcción de Memoria”.
Convocado por el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, junto con el Círculo de Periodistas de Bogotá y la Organización de Estados Iberoamericanos, este concurso para los periodistas es el único en el país que se hace exclusivamente con el tema de la paz y el conflicto.
Y ayer precisamente en el Día Internacional de los Derechos Humanos, cerca de cien personas se dieron cita en al auditorio del Centro de Memoria para conocer los cuatro ganadores, en radio, prensa, medios alternativos y televisión, cada uno con un monto de cuatro millones de pesos y un diploma.
En la mesa de la ceremonia, Camilo Gonzáles Posso, director del Centro de Memoria, Germán Mejía y Raúl Gutiérrez, presidente y secretario general del CPB, Helena Laporta, directiva de la OEI, y Ana Teresa Bernal, Alta Consejera para las Víctimas del Distrito.
“Las noventa propuestas que llegaron al jurado, todas excelentes, nos hablan del conflicto y debemos mantenerlas para la memoria, pero lo que sigue no es el conflicto pues vamos a tener por lo menos dos años de trámite de la puesta en marcha de un periodo de muchas tonalidades, algo inédito y de difícil interpretación”, señaló Gonzáles Posso.
Añadió que vendrán con seguridad nuevas narrativas del periodismo en la paz, un reto para los medios de “cómo hacer prensa en la transición”.
Laporta saludó esta iniciativa del Centro de Memoria que consideró un aporte en la búsqueda de la verdad y por la defensa de los derechos humanos, una misión que auspicia la Organización de Estados Iberoamericanos.
Ana Teresa Bernal señaló que la labor de los periodistas que narran los hechos de la violencia política debe destacarse, no solo por su valentía y coraje sino por que contribuyen a esclarecer la verdad de un conflicto que ha desgarrado al país.
Los premios
Tanto en prensa, medios alternativos, radio y televisión, un comité seleccionador del CPB escogió seis postulados por cada categoría como nominados, y finalmente el jurado, integrado por Olga Behar, Oscar Montes y Carlos Chica, fijó los cuatro ganadores.
En prensa el ganador fue Olga Patricia Rendón del periódico El Mundo, de Medellín, de con su trabajo “Una deuda histórica”, que demuestra “consistencia narrativa, soporte literario, así como confrontación de fuentes y valiosos recursos gráficos e infografía”, dice el acta. Rendón publicó cinco entregas en para esta historia y llegó invitada por los organizadores desde su ciudad a la entrega.
En radio el premio fue para “Cuerpos gramaticales”, una producción de gran aliento que narra la tragedia que conllevó hace trece años la “Operación Orión”, del Ejército en Medellín, que dejó decenas de muertos.
El programa fue presentado por la emisora alternativa “Mixticius”, que cada vez gana adeptos en América Latina. Silvia Ojeda fue la galardona pero se trata de un equipo con otros dos periodistas radiales.
En medios alternativos fue destacada Isabella Bernal del portal “Las 2 orillas”. Se trata de un reportaje sobre la realidad de la reconciliación en un país en guerra titulado “Sanar narrando”.
Y finalmente en televisión el galardonado fue un periodista regional que trabaja con toda entrega en Arauca, Daniel Fernando Martínez y que convocó un inmenso aplauso del auditorio. Se trata de un programa de 20 minutos que presenta la tragedia.
Su documental “Arauca, del dolor a la esperanza”, del canal CNC, visibiliza el conflicto armado en las regiones con su carga de dolor para la población civil y todos los combatientes, en medio de la imponente y hermosa geografía de esta región. Martínez también viajó desde Arauca a la capital invitado por el certamen.
De esta manera se volvió a editar, con la II convocatoria del Centro de Memopria, Paz y Reconciliación uno de los premios de periodismo más importantes del país, cuyos trabajos tocan la sensibilidad de todos los colombianos, la tragedia de la violencia política y sus víctimas, pero que también, en medio del dolor, mira un horizonte de esperanza.
