Ayer por fin se dio el tan esperado debate sobre corrupción de Jorge Enrique Robledo y Claudia López. La cuarta fue la vencida y a pesar de que solo asistió la mitad del Senado, hubo quórum y se pudo llevar a cabo. Robledo y López expusieron de manera fundamentada una red criminal de corrupción que unta a Néstor Humberto Martínez y a Germán Vargas Lleras. También acusaron a las campañas Santos y Zuluaga por haber recibido dineros de Odebrecht. No dejaron títere con cabeza.
A pesar de las pruebas, vídeos, audios, fotos e infografías, las bancadas de los partidos untados se dedicaron a criticarle el tono a Claudia López ¡Les están gritando corruptos y ustedes solo se fijan en el grito! No se propusieron desvirtuar la evidencia, sino se hicieron los ofendidos por el tono de voz de López.
¿Grosera y vulgar Claudia? ¡Grosera y vulgar la corrupción que se carcome las vísceras de este país! López habla con la indignación más profunda que puede producir que se roben los recursos públicos o es que a usted, lector, no le indigna que por la corrupción los niños de las escuelas públicas del Cauca reciban almuerzos podridos. ¿No le indigna saber que con la plata que se robaron en Reficar hubiéramos construido dos canales de Panamá? ¿No le indignan los 50 billones que se roban al año? ¡Claro que le indigna!
Los políticos clavan una reforma tributaria un 24 de diciembre mientras todos están festejando, eso sí, muy cordiales y con buenos modales. Se roban hasta el nido de la perra, eso sí, con un tono muy suavecito y con formas bien cachacas, caray. Llega a salir Claudia López a decirles que son unos hampones y que respeten los recursos públicos y ahí si todos se ofenden y pierden la cabeza.
¿O sea que el senador Carlos Felipe Mejía del Centro Democrático si puede parar el debate a punta de gritos pues tiene "vehemencia y pasión en el discurso"? ¿Pero lo de Claudia López si es alharaca y gritería? No seamos machistas.
Basta de eufemismos, Colombia tiene que dejar de ser tan eufemística, al corrupto hay que decirle corrupto y no "doctor". Hay que repudiarlos, por su avaricia y su falta de valores se mueren niños de hambre o es que cómo tratamos a los políticos corruptos de este país, ¿con miedo?, ¿con pleitesía?, ¿les damos pasito?.
¿A ustedes se les olvida que en este país lo matan a uno por decir la verdad incomoda? ¿Se les olvida que hay muchísimos casos de políticos involucrados en homicidios? Claudia López es una valiente y tiene muchísimos pantalones para pararse frente a la caterva de hampones del Senado y decirles la verdad.
Solo es subirse al estrado de la plenaria y decir "criminales" y medio Congreso se siente aludido y ofendido. Tan sensibles, pues, ¡oh señores de altas calidades morales, perdonadnos por reprocharos que se roben los recursos públicos y nos tengan en el atraso!
Claudia López, mujer verraca, tienes las manos limpias y por ello puedes criticarlos, tu tono de voz es el tono del indignado, el que siente el dolor de ese niño merendando en el colegio una bolsa de agua y medio plátano, gracias por tu valentía y por el debate que diste junto a Robledo. Cuídate de los inescrupulosos de este país y no dejes de destapar la olla fétida de la corruptela.
