Y el agradecimiento va a raíz de un supuesto, que aunque no debe ser considerado dentro de la lógica razonable, da para debatir en los distintos contextos que hoy día se ven afectados por el COVID-19. Gustavo, siempre ha manifestado su idea absoluta de reformar el sistema de salud colombiano, tarea que si bien es necesaria, acarrearía una serie de modificaciones estructurales materiales e inmateriales, que de habernos tomado con esta crisis viral, surge la duda de hasta cuál punto y en qué gradualidad este tipo de cambios deben efectuarse en una posible llegada a la presidencia de un candidato que promueva estas ideas.
Supongo, que con la eliminación del modelo de las EPS por un modelo de prevención público - gratuito, generaría un tráfico de actividades impresionante. Se alternaría por un conjunto de alteraciones drásticas ante el cual no estamos preparados por nuestro arraigado prototipo del año 93 pero sobretodo por la ineficiencia administrativa del estado, que en caso de haber llegado dicho candidato hace 2 años al primer puesto del país, nos tendría expuestos a una pandemia mucho peor que la que vivimos actualmente.
El propósito de este escrito, es evaluar dicha idea, con la anticipación necesaria, pues ante lo que está sucediendo en Colombia, aunado específicamente a lo que se viene para la post-pandemia, no considero que los índices de popularidad de Ivan Duque crezcan. ¿Es plausible un cambio a ese nivel? ¿Es conveniente? ¿Qué reformas serían las adecuadas para fortalecer un sistema de salud en crisis?
Por ahora, continuemos con la esperanza de que las medidas de prevención, cuidado y aislamiento sean beneficiosas para la población, pero también con la zozobra de la cantidad de tutelas que se vendrán cuando se descubra una vacuna y las EPS nieguen el acceso a ellas, porque este país y su sistema de salud, ya lo ha demostrado.
Claramente, le agradezco a Dios no habernos enfrentado a esta enfermedad en un sistema en construcción y si el darnos la oportunidad de construir uno a futuro, pero con una justificación y un programa claro, cero improvisado.
