Un diálogo intersectorial liderado por la Alcaldía de Pueblo Rico, con el apoyo de la Gobernación de Risaralda y la participación de las Fuerzas Armadas, el Ministerio Público, el Ministerio del Interior y la Agencia Nacional de Tierras, fue propuesto hoy por el Gobernador Sigifredo Salazar Osorio para solucionar las diferencias que se han presentado entre las comunidades negras e indígenas en ese municipio risaraldense.
La propuesta fue hecha por el mandatario al presidir el Consejo Extraordinario Departamental de Seguridad que, con asistencia del director de la Carder, Leandro Jaramillo Rivera, sesionó en la Gobernación de Risaralda.
Salazar Osorio expresó que los hechos de intolerancia social que se presentaron entre integrantes de estas comunidades son rechazadas por las autoridades, quienes deben realizar seguimiento y analizar las causas reales que los ocasionaron.
Durante la sesión del Consejo de Seguridad, el alcalde de Pueblo Rico, Rubén Darío Ruiz Acevedo, indicó que su administración al igual que la Gobernación de Risaralda, ha implementado programas y estrategias para mejorar la calidad de vida de las poblaciones negras e indígenas y se han realizado de manera incluyente y con total enfoque diferencial.
Al analizar el tema de minería, el director de la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, Carder, Leandro Jaramillo Rivera, dijo que se sigue manteniendo la posición respecto al proyecto de la vía que piden las comunidades indígenas para comunicar a Dokabú con Curripipi, el cual debe cumplir con los requerimientos técnicos necesarios. Agregó que si la vía es terciaria, como lo vienen indicando, debe ser intervenida por la Secretaría de Infraestructura Departamental.
Finalmente, el director de la Carder aseguró que no hay extracción minera en el sector de Pueblo Rico, “lo que se ha planteado y evidencia es la realización de esta actividad en el Chocó, y las autoridades ambientales de este departamento deberán realizar las verificaciones ambientales correspondientes”.
