En diciembre de 2020, el exsenador del Partido de la U, Eduardo Pulgar fue capturado y trasladado a la Cárcel La Picota por pagarle $200 millones a un juez de Barranquilla para beneficiar a un amigo suyo, el ex cónsul honorario de Colombia en Polonia Luis Fernando Acosta Osio, en un juicio de sucesión. Entre la espada y la pared bajo el velo de su abogado Jaime Granados, Pulgar decidió usar una estrategia para salvarse: contarlo todo. La sacó barata, desde La Picota fue informado que sería condenado por el delito de tráfico de influencias a 4 años y 10 de meses de prisión.
Tras su buen comportamiento y debido a que el tiempo de condena fue considerado 'bajo', Pulgar fue trasladado el pasado domingo 18 de julio por el INPEC a Malambo, Atlántico al batallón militar de Ingenieros Vergara y Velasco. El recinto es una cárcel dentro de un batallón militar, una especie de club militar.
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