La familia del soldado quien acabó con la vida de Juliana Giraldo cuando transitaba en su vehículo por un retén, pidió ayuda psicológica para el joven de 19 años que se encuentra sumergido en una depresión con intensiones de acabar con su vida. El hermano del soldado, que no reveló su identidad por seguridad, declaró que son una familia del campo y el joven estaba prestando el servicio militar obligatorio y nunca antes había tenido posesión de un arma.
A su vez, declaró que su hermano era solo un niño, en el momento en el que disparó contra Juliana Giraldo, lo llamó en llanto para decirle que no quería seguir viviendo pues acababa de matar a una mujer por equivocación. Asegura que él no sabía que Juliana era transexual, información que conoció por los medios de comunicación. La familia del joven soldado recogerá testimonios de conocidos y allegados que afirman que no constituye un peligro para la sociedad y es un buen muchacho.
Por su parte, doña Gloria, madre de la víctima, se pronunció ante los micrófonos de los medios sobre las difíciles condiciones en las que viven y trabajan muchos miembros de las Fuerzas Militares dejando en claro que, aunque si hay un culpable de la muerte de su hija, no es el soldado que le disparó, si no los altos mandos del Ejército Nacional.
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