El regreso de Germán Vargas al país después de sus vacaciones ha calentado la posibilidad de su candidatura presidencial, que es el Plan B del Santismo. El Presidente no las tiene todas con él porque su única carta son los diálogos sometidos a una presion constante del Uribismo. La campaña de vallas "satanizando" la negociación y a sus protagonistas ha tenido efectos y el péndulo de la opinión pública se ha movido a favor del Uribismo y su líder tiene un innegable eco entre los colombianos como lo demostró el concurso El Gran colombiano. Próximamente comienza la recolección de firmas del Puro Centro Democrático que será el lanzamiento anticipado de la campaña, momento clave para medir las fuerzas. Vargas Lleras se alista para cualquiera de los dos escenarios.
