Llegó hace 32 años a la Escuela de Cadetes General Santander de la Policía y desde entonces le ha prestado a la institución un servicio sin machas en su hoja de vida. Ahora la general Sandra Hernández asume el reto más grande de su carrera: dirigir la lucha contra la criminalidad en Bogotá, una ciudad sitiada y sumida en un ambiente de zozobra por hechos como el asesinato de un joven estudiante que se negó a entregarles a los ladrones 400 euros que había comprado para que su mamá viajara a Europa.
A ella, la primera mujer que llega el comando de la Policía Metropolitana de la Ciudad, le corresponderá estrenar el nuevo cuartel de esa unidad en el sector del Salitre y dirigir el programa de fortalecimiento de las capacidades del pie de fuerza.
La general Hernández viejo de dirigir la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA), donde logró destacados resultados en la lucha frente al contrabando.
Además de administradora policial, la oficial es magister en criminología y victimología, especialista en seguridad y está acreditada como investigadora de accidentes de tránsito.
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