Por primera vez en 23 años desde que fue puesta en libertad gracias a la Operación Jaque, la excandidata presidencial estará cara a cara frente a sus captores, los excabecillas de las Farc Rodrigo Londoño, Pastor Álape, Carlos Antonio Lozada y otros excombatientes. Al encuentro asistirán también antiguos compañeros en cautiverio de Ingrid Betancourt como el exgobernador del Meta Alan Jara, Luis Eladio Pérez y el exmilitar John Frank Pinchao. La excongresista aceptó la invitación del padre Francisco De Roux con quien ha estado en conversaciones y trabajando por la reconciliación durante el último año.
Una propuesta que rechazó durante el Proceso de Paz cuando fue llamada a dar su testimonio en La Habana. En el 2020 se cansó de callar rindiendo testimonio ante la Jurisdicción Especial Para La Paz (JEP). Narró la crueldad y vejámenes que sufrió en la selva a manos de exguerrilleros, fueron despectivos y la humillaban a diario por ser mujer amparándose en un discurso de igualdad de género.
Antes de cumplirle al padre De Roux, Betancourt se reunió con Iván Duque, pusieron sobre la mesa el marco del Paro Nacional y la situación de la juventud. Betancourt le hizo saber al presidente que se debía eliminar del imaginario colectivo que los jóvenes pobres que protestan son terroristas o vándalos. Betancourt, quien ahora reside en Francia, le expresó también su preocupación por la mala imagen que hay en Europa de la situación actual del país debido a la represión de la manifestación pacífica y el abuso de la Fuerza Pública. Betancourt también se reunirá con jóvenes de la Primera Línea, líderes del Paro y empresarios. Posteriormente, se encontrará con la alcaldesa de Bogotá Claudia López y Carlos Ruiz Massieu, jefe del Comité de Verificación de las Naciones Unidas.
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