Ante el avance de los casos de coronavirus en la región, el Valle del Cauca, incluyendo Cali, regresó a “alerta naranja”. Situación que se agrava ante la irresponsabilidad de muchas personas que ni siquiera portan el tapabocas y no se lavan las manos, además de propiciar aglomeraciones. En Cali se tiene un promedio de 15 muertos por día por causa de la pandemia.
La decisión que, incluye que los hospitales públicos tendrán que suspender cirugías programadas y concentrar la atención en pacientes de coronavirus, fue dada a conocer por Clara Luz Roldán (gobernadora), Jorge Iván Ospina (alcalde de Cali), y María Cristina Lesmes y Miyerlandi Torres (secretarias de salud, respectivamente). La región se encontraba en “alerta amarilla”, que significa panorama moderado.
La “alerta naranja” también se toma porque las camas UCI para pacientes con coronavirus en el Valle tienen un promedio de ocupación del 64%, el mismo que en Cali es del 65%, cuando apenas hace dos semanas estaba en el 48% en el caso del Valle.
Igualmente, la medida incluye una serie de restricciones que van desde prohibir la realización de las tradicionales fiestas de despedida en el sector público, lo mismo que en las empresas privadas. Además, se recomendó a los ciudadanos que las novenas se hagan en familia, sin visitas… y en lo posible en zonas bien ventiladas. Se recordó que los niños son altos transmisores del virus, así ellos no lo desarrollen.
En cuanto a los ciudadanos se insistió en la necesidad de colaborar portando el tapabocas cubriendo nariz y boca, además de lavarse y desinfectar las manos. También se les exige evitar aglomeraciones, ni concurrir a eventos donde haya más de 50 personas.
En lo que respecta al comercio, a todos los locales se les exigirá extremar las medidas de bioseguridad y en lo posible ampliar sus horarios en diciembre para contribuir a que no se formen tumultos. La iniciativa es clave porque se avecina la temporada decembrina.
La gobernadora Clara Luz Roldán fue enfática en informar que en el caso del departamento quedan completamente prohibidas las fiestas de despedida de año en todas sus secretarías, institutos descentralizados y, en general, en la totalidad de las dependencias que lo conforman.
El panorama del coronavirus se ha venido complicando tanto en Cali, como en el resto del Valle en las tres últimas semanas, sin que haya interés marcado por un amplio grupo de ciudadanos en colaborar en controles.
Alarma por decesos
Las autoridades sanitarias del Valle, además de adoptar la “alerta naranja” en todo el departamento, llamaron la atención sobre lo que viene ocurriendo en Cali, Palmira, Tuluá y Buga, donde vienen aumentando de manera acelerada los casos por coronavirus, incluyendo decesos.
En Cali, el promedio de muertes es de 15 por día, a la postre uno de los más altos del país.
El pasado jueves, por ejemplo, en Tuluá se registraron 5 decesos y en Palmira 2, mientras que en Cali hubo 12.
La secretaria de Salud de Cali, Miyerlandi Torres, dio a conocer que en septiembre se presentaron 340 decesos en esta ciudad, en octubre 285, y hasta el 26 de noviembre iban 273 muertes.
Por su parte, María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle, aseveró que en general el panorama de la pandemia en el Valle es muy similar al de Cali e invitó a todos los alcaldes de la región a hacer causa común para enfrentar la pandemia, lo mismo que invitó a los vallecaucanos a observar las normas de bioseguridad.
