Cachos, su amor por Duque y odio a Silvestre: los escándalos de Carlos Vives

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Si alguien ha sabido ganarse el corazón de los colombianos, ese ha sido Carlos Vives, un maestro de la música y sobretodo un 'tipazo'. Hace unos meses se filtró un video en el que el artista es sorprendido por un grupo de músicos callejeros en Cartagena que aprovecharon para improvisarle una de sus canciones. El samario no los ignoró, al contrario cantó con ellos y les agradeció el gesto. Aunque se ha tropezado se sabe levantar con más fuerza, los escándalos que ha enfrentado no lo han marchitado por el contrario lo han renovado.

Como olvidar a Carlos Vives en los 80 cuando era parte del elenco 'Pequeños Gigantes' pero sería en ‘Gallito Ramírez’ cuando saltó al estrellato. En el set se enamoró de Margarita Rosa de Francisco y terminaron casándose en 1988. Ante todo pronóstico y las esperanzas de todo un país por su amor, el matrimonio terminó en menos de dos años. Carlos Vives confesó que la niña Mencha nunca estuvo verdaderamente comprometida con la relación. A pesar de la tusa, el artista le dio una nueva oportunidad al amor, se casó por segunda vez con la puertorriqueña Herlinda Gómez producto de la relación nacieron sus dos hijos. Todo iba viento en popa para la familia Vives Gómez hasta que el cantante conoció a la exreina de belleza, Claudia Elena Vásquez, se enamoraron y se convirtieron en amantes.

La exreina y cantante se conocieron en 1996

Herlinda sospechó de su esposo y no le quedó de otra que contratar un detective privado que siguiera sus pasos. Vives le juró mil y una vez que no le era infiel pero las fotografías hablaron por si solas. Tras casi 20 años de matrimonio, la puertorriqueña le pidió el divorció que le salió bastante caro al samario quien además tuvo que afrontar el escarmiento público de haber mantenido una infidelidad que acabó con su hogar.

Tras 20 años de matrimonio y 2 hijos dieron fin a la relación por la infidelidad del cantante

Este no sería el único tropiezo que afrontó Carlos Vives, tras el estreno del sencillo 'La Bicicleta' -ganador de un Grammy Latino- al lado de Shakira, fue demandando por plagio por el cantante cubano Liván Castellano quien reclamó que la canción era una copia de su tema "Yo te quiero tanto" grabado en 1997. Carlos Vives negó el plagio y un tribunal en Madrid le dio la razón al determinar que "Conforme a las pruebas aportadas al expediente, la obra “La Bicicleta” y la obra “Yo te quiero tanto” son dos obras originales, completamente diferentes en sus elementos armónicos y melódicos".

'La Bicicleta' llegó a los estrados judiciales en el 2016

Carlos Vives también ha sido protagonista de batallas con otros ídolos del género como fue el caso de su altercado con Silvestre Dangond, La pelea entre los cantante inició cuando Vives molesto acusó en una entrevista a Dangond de contratar a Andrés Castro, su productor y algunos músicos para realizar su nuevo album 'Gente Valiente' sin consultarle antes. Ante las fuertes acusaciones, Dangond arremetió contra el samario llamándolo mentiroso pues su equipo y manager fueron quienes lo habían contactado a él para grabar. Silvestre le cuestionó a Carlos Vives cómo pretendía que el productor Andrés Castro no le grabará a ningún artista si ese era su trabajo también le dijo que le reglaba su equipo con "todo y ñapa más moño grande " pues él tenía el suyo. Finalmente, el urumitero invitó a Vives a grabar algún tema juntos pues la última vez que había tratado de contactarlo por medio de su esposa Claudia Elena Vásquez rechazó la propuesta.

Los artistas han participado juntos en diferentes conciertos

Cabe resaltar que el cantante ha sido fuertemente juzgado por resaltar la gestión de Iván Duque y agradecerle el apoyo que ha recibido del presidente con quien ha sido fotografiado en eventos públicos al igual que con el expresidente Álvaro Uribe. Sin embargo, el cantante nunca se declarado públicamente uribista por lo que lo han llamado en reiteradas ocasiones 'tibio'. En una ocasión un docente de la Universidad de Cartagena declaró: "Hay dos Carlos Vives: el que dramatiza y llora en documentales y videos, por la muerte de la Ciénaga Grande; y el que se abraza con los políticos que han convertido las reservas del Magdalena en proyectos hoteleros (y matan por ello). El primero es marketing; el segundo, real".