El ministro de salud Alejandro Gaviria mostró su inconformidad con el manejo de Café Salud, entidad que estaba siendo auditada por la red de auditores de origen inglés Baker Tilly cuyo representante legal en el país es el médico Augusto Galán Sarmiento, de la que también es socio su primo el exfiscal Alfonso Valdivieso. Gaviria le pidió la renuncia al gerente encargado Guillermo Grosso. Los números no daban para menos. En cuatro meses Grosso firmó contratos por $1.9 billones de pesos algunos tan extravagantes como el alquiler de camionetas blindadas para él y su familia. El peritaje de la firma auditora Baker Tilly no advirtió ninguna de las irregularidades que han salido a la luz que la firma auditora justifica diciendo que su trabajo era estrictamente contable. Sin embargo, el ministro de Salud le salió al quite a la situación ordenando una segunda auditoria por otra compañía externa para intentar proteger las finanzas de una EPS que atiende cinco millones de personas.
Baker Tilly tiene una importante presencia en el sector salud de Colombia como auditoria de varias EPS entre las que se encuentran además de Cafesalud, Saludcoop, Famisanar y Cruz Blanca. El contador Luis Alfredo Caicedo quien apareció muerto y quien actuaba como revisor fiscal de Cafesalud tambien formaba parte de Baker Tilly.
