Luis Ángel Rodríguez fue encontrado sin vida en un basurero. Después de asesinado lo envolvieron en en bolsas de basura y lo trasladaron en una carreta de reciclaje. El cuerpo lo dejaron botado en un basurero del centro de Bogotá. Cuando la policía destapo las bolsas, se dieron cuenta que el cadáver tenía decenas de heridas. Medicina Legal confirmó que lo mataron con más de cien puñaladas.
Las investigaciones determinaron que el asesinato lo cometieron en una vieja casona de paredes verdes y portones color café. La casa, puesta en el barrio San Bernardo, funciona como un hotelucho de paso llamado paga diario, donde los huéspedes pagan menos de cinco mil pesos por pasar la noche en camarotes.
Esta tenebrosa vivienda, comanda una banda de criminales conocida como Los Seguros, la conocen en la zona como la casa de los masajes. Así, masajes, le llaman a la práctica de torturas y asesinatos. Según varios testigos, interrogados por los investigadores, constantemente adentro de esta casa se escuchan gritos espantosos seguidos de silencios aturdidores.
