El alcalde de Bucaramanga Juan Carlos Cárdenas y el gobernador de Santander Mauricio Aguilar no han logrado un acuerdo frente a las medidas del COVID-19. Aguilar esperaba implementar el pico y cédula y unificar la ley seca en el departamento pero Cárdenas desatendió la orden y dispuso incluso de otros horarios para la venta de licor.
Esta no es la primera vez que se ve marcada las diferencias políticas entre ambos mandatarios. La defensa del páramo de Santurbán y la oposición a la minera Minesa, que Cárdenas ha asumido como bandera política, también ha sido motivo de desacuerdo. Recientemente el alcalde convocó a una marcha e incluso invitó al gobernador Aguilar pero no asistió e inicialmente se opuso a la realización de esta.
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